HRC encadena la peor racha de su historia en la categoría reina desde que empezó a competir en 1982.
Honda había estado presente en el Mundial en décadas anteriores, rozando la gloria en 500cc junto a Mike Hailwood a mediados de los ’60, pero nunca había logrado el título. En 1982 Honda acotó su departamento de carreras y competición en HRC, alcanzando muy pronto su primer título con Freddie Spencer en 1983 sobre la NS 500cc.
Desde entonces Honda ha tenido habitualmente la mejor moto de 500cc y posteriormente de MotoGP o al menos, una moto competitiva que en manos de un gran piloto podía luchar por las victorias y el título. Una verdad lo más lejos de la realidad desde que todo se torciera en la primera carrera de 2020, coincidiendo con la grave lesión en el húmero de Marc Márquez.
Desde entonces todo ha ido cuesta abajo y sin frenos. En 2020 el otro piloto oficial Álex Márquez, que además era “rookie”, no consiguió la victoria, tan solo dos podios. Y de esa forma Honda entró en una crisis donde tuvo su peor racha de carrera seguidas sin ganar, un total de 21 desde Valencia 2019 hasta Sachsenring 2021, cuando de nuevo Marc Márquez volvió a saborear el triunfo.
Una racha tan negativa para una marca tan importante como Honda, que parecía insuperable… ¿Seguro? Pues no, estamos viviendo una aún peor. La última victoria de la marca del Ala Dorada llegó el día de la última carrera de Valentino Rossi sobre su MotoGP en Italia, el día que Bagnaia se cayó yendo primero y Quartararo se proclamó campeón. De nuevo con un nombre propio, Marc Márquez en Misano 2021, algo que ya parece muy lejano.
Tras eso llegó un nuevo caso de diplopía y un 2022 caótico donde sufrió otro episodio más de diplopía y una cuarta operación en su húmero derecho. Su único gran éxito, el segundo lugar de Phillip Island en los últimos Grandes Premios del año. Pero… ¿Y el resto de Honda? Pol Espargaró pasó con más pena que gloria, con algún podio pero muy perdido al final de su contrato.
El resto de pilotos de la marca más de lo mismo. Álex Márquez decidió salir, dirección a Gresini Ducati y acertó de pleno como demuestran sus resultados ahora. Lo cierto es que tras el Gran Premio de Argentina ya son 24 carreras en la Honda no gana, la peor racha de su historia en MotoGP. Y lo preocupantes es que desde que ganara una carrera Crutchlow en 2018, ningún otro piloto Honda que no fuese Marc Márquez, ha ganado.
En la cita inicial de Portugal, ya se pudo comprobar que la RC213V no está al nivel, siendo la peor moto de la parrilla. Ni velocidad punta, ni agarre, ni paso por curva. Marc Márquez se lo jugaba todo en las frenadas, siendo héroe el sábado con la pole y el podio en la Sprint Race, para convertirse en el villano el domingo tras un error en el que estropeó la carrera a Oliveira y Martín.
No sólo la polémica de aquello aún colea, sino que su sanción, mal redactada y después modificada sigue en los despachos para ver si finalmente tendrá que cumplirla o no, en Austin donde aún es duda su participación por su lesión en el dedo de la mano o si la hará más adelante. Joan Mir también salió último la parrilla de Argentina y se lesionó en la primera vuelta de la Sprint Race. Que el domingo no hubiera ninguna Repsol Honda en pista fue casi poético del desastre actual.
El equipo satélite de Honda con un gran piloto como Álex Rins y el japonés Nakagami, también naufragó, pese a que el primero tuvo destellos en ciertos momentos de la carrera. HRC está metido en un pozo. Lo que es cierto y datos objetivos hay de sobra, es que estamos ante la peor Honda de la historia y le toca llevarla al límite a uno de los mejores pilotos que jamás hayamos visto, Marc Márquez.
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