El piloto valenciano se vistió en Jerez con los colores de Repsol sustituyendo a Marc Márquez en MotoGP.
El pasado fin de semana Iker Lecuona vivió un sueño. Desde el momento en el que le confirmaron para pilotar en MotoGP sustituyendo a Marc Márquez, el valenciano se aupó a un nube de la que no bajó hasta el domingo por la tarde. El actual piloto de Honda en WorldSBK pudo volver a la categoría reina del Mundial de una inesperada manera, pero aún así aprovechó la oportunidad al máximo. Incluso rozó los puntos en la carrera del domingo en el Circuito de Jerez-Ángel Nieto. “Me he divertido y he trabajado; he aprendido lo máximo posible en un sueño hecho realidad“, explicaba el propio Lecuona tal y como nos traslada Manuel Pecino.
“Estar trabajando en el asiento de Marc Márquez ha sido una experiencia inolvidable; hasta quedé muy cerca de los puntos en la carrera del domingo“, describe el piloto valenciano. Una Lecuona que tenía un misión clara: devolver la moto al box tanto el sábado como el domingo: “Y la misión la cumplí. Incluso llegué a preguntar si podía hacer el test del lunes. Entiendo que no me dejen porque este viernes ya me subo de nuevo a una SBK. Es la carrera de Barcelona y el miércoles tengo unos test con el equipo, por lo que quieren que descanse para ello“.
Lecuona: “Se ha llegado a un punto que no hay diversión para los piloto”
Sin test pero sí con la experiencia de haber disputado un fin de semana completo en MotoGP. Lecuona explica cómo vivió en primera persona una sprint. “Me llevo la experiencia de haber terminado una sprint bastante loca. Luego mejoré en la carrera del domingo, y me quedo con eso“, apunta Iker; añadiendo que espera que su trabajo sirva para que durante las próximas semanas Repsol Honda pueda evolucionar la moto: “Espero que viene mis datos saquen algo de provecho para probar con los pilotos que tienen“.
Dentro de toda la frenética experiencia, Lecuona valora cómo es MotoGP con una carga aerodinámica suprema. Para él, dicha carga es excesiva e impide ver la calidad de los pilotos: “Se ha llegado a un punto que no hay diversión para los pilotos. Ir en grupo, ir detrás y que haya turbulencias que no te dejen adelantar.Es como la F1 antigua. No me gusta ese aspecto y creo que se ha perdido el tema del pilotaje. Es un punto bastante aburrido para los pilotos y el espectador“.
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