Tras la proclamación de Joan Mir como nuevo campeón del mundo de MotoGP, el director técnico del Leopard Racing ha hablado sobre el piloto mallorquín en una entrevista con GPOne.
Joan Mir se proclamó campeón del mundo de MotoGP el pasado domingo en el Circuito Ricardo Tormo. El piloto mallorquín se consagraba como el cuarto campeón español de la categoría reina tras una temporada en el que demostró ser el más regular. Joan volvía a saborear el triunfo con su segundo título, y en momentos como estos, es imposible no recordar a personas que han guiado su entorno desde su tránsito por Moto3. Entre ellos se encuentra Christian Lundberg, director técnico del Leopard Racing.
Lundberg atesora un gran número de éxitos como profesional, y ha acogido a jóvenes pilotos que han llegado muy lejos recientemente. Entre esos jóvenes pilotos están tanto Fabio Quartararo, como Andrea Locatelli, y el vigente campeón del mundo Joan Mir. Conoce bien al piloto mallorquín desde su paso por el CEV y lo ha querido resaltar en una entrevista en exclusiva con GPOne. “La primera vez que lo vi dije: da miedo. Ya en el primer test me había enamorado, iba muy fuerte. Además, es un chico de oro, no suelta comentarios innecesarios, siempre tiene la cabeza sobre los hombros y un cerebro que funciona”.
A parte de lo conseguido por Joan esta temporada en MotoGP, cabe destacar la fortaleza mental que lo ha caracterizado de manera sobrecogedora. Sin aparente presión, con tranquilidad y siendo regular evitando al máximo los errores. Y por aquel entonces, en 2017, ya venía apuntando grandes maneras. “Recuerdo que todos estábamos tranquilos, porque fue Joan quien nos hizo sentir así. Sabías que siempre llevaría la moto al podio. No nos daba miedo a que se cayera, prácticamente porque sabíamos que ganaría. Transmitía una confianza que no era típica de un niño”.
Las primeras apuestas al inicio de la temporada apuntaban a que Marc Márquez, antes de lesionarse, Fabio Quartararo o Maverick Viñales podían ser los principales favoritos para aspirar al título. Sin embargo, Suzuki ha demostrado durante todo el año una constancia difícil de superar y un nivel poco comparable. A mitad de temporada, Lundberg lanzó sus cartas a que sería Joan quien se haría con el título. Y así ha sido. “Antes de la carrera en Barcelona me encontré con Brivio en el aeropuerto y le dije: ‘estate atento porque Joan gana el Mundial. Cuando huela la sangre que gana, no tendrá miedo y no será estúpido. Te dará una gran satisfacción”.
Hasta el Gran Premio de Europa, Joan Mir lideraba la clasificación general sin haber logrado una sola victoria durante la temporada. Pero llegados a ese punto, el piloto de Suzuki supo deshacer esa idea para convertirla en un nuevo logro de su carrera deportiva consiguiendo así su primera victoria en MotoGP. “Ganó en el momento de máxima presión, ahí es donde un campeón marca la diferencia. Ganar con tanta autoridad, te hace entender su profundidad”.
“Si hubiera estado Márquez, el campeonato habría sido diferente. A Joan no le importa en absoluto. Creo que tal vez sea el único que no está sujeto a la hegemonía de Marc a nivel psicológico, se cree más fuerte que Marc. ¿Cuántos pilotos piensan eso? Tal vez se puedan contar con la punta de los dedos y no sé quiénes son. El 90% de los pilotos ya empiezan psicológicamente derrotados contra Márquez, mientras que Mir sabía que tarde o temprano podría jugar en igualdad de condiciones contra él y vencerlo. Es una gran ventaja sobre sus rivales este año”.
El director técnico del Leopard resalta sus mayores cualidades. “La frenada definitivamente, y luego la forma de hacer que la moto gire en medio de la curva usando el cuerpo, los brazos y empujando. Tiene cualidades en el pilotaje que ha desarrollado con el tiempo. En el pasado ha entrenado con pilotos como Gibernau o Pedrosa y ha aprendido lo que le han transmitido. Es una cualidad fundamental de Joan. Hay otros pilotos que no prueban nuevas soluciones. Mir, en cambio, entiende los beneficios y luego trata de mejorarlos”.
El punto en el que quizás más ha cojeado el vigente campeón del mundo ha sido el día de la clasificación, con el tiempo a una vuelta. “Joan construye su rendimiento desde el viernes por la mañana, cuando llega a la carrera sabe lo que tiene y sabe que llevará a casa lo mejor. Pero su talón de Aquiles tal vez sea la clasificación”.
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