Maverick Viñales se fue al suelo con Pecco Bagnaia. Los pilotos vivieron un momento de tensión tras la caída, aunque posteriormente lo arreglaron con deportividad.
Maverick Viñales y Pecco Bagnaia se encontraban metidos de lleno en la lucha por el podio de MotoGP en Le Mans. En una serie de adelantamientos, los pilotos se tocaron, acabando los dos en la grava. Instantes después, se enzarzaban en una discusión en la que incluso llegaban a las manos; un hecho vergonzoso para el que, hasta el momento, no se conocen sanciones.
Algunos minutos después, ambos pilotos llegaban al paddock y, ya más calmados, se daban la mano con deportividad. El piloto de Aprilia explicó posteriormente lo sucedido con el Campeón del Mundo de MotoGP, según nos ha trasladado nuestro colaborador Manuel Pecino desde el paddock de Le Mans.
Cómo vivió el incidente. ” Es una pena porque yo le pasé limpiamente.. Quizá debería haberle tocado, que es como se pasa ahora, y haberle echado fuera. He ido a cambiar de dirección y, cuando lo he hecho, nos hemos tocado. Desafortunadamente, nos estrellamos en el peor sitio. Y luego, desde mi punto de vista, el podía haberme dejado un poco más de espacio en ese cambio de dirección. Es una pena porque nos hemos llevado un cero en un fin de semana en el que nos sentíamos con mucho potencial.”
Considera el incidente un ‘lance de carrera’. “Yo no sabía dónde estaba el otro piloto. Realmente no lo sabía. Creo que él podía verme un poco cuando cambió la dirección. Pero siempre es complicado, hay diferentes puntos de vista y creo que los Comisarios deben revisarlo. Pero al final, para mí, es un lance de carrera, nada más. Es una pena, nos vamos sólo con un punto en una pista donde fuimos muy rápidos; y quizá en la carrera los más rápidos.”
“Esto son las carreras, y necesitamos que haya respeto entre los pilotos”
Los pilotos fueron convocados por los Comisarios de la FIM, que los amonestaron. “Sí, ya hemos hablado. He hablado también con Pecco, nos dimos nuestros puntos de vista. Y, al final, tenemos que tener respeto por los pilotos. Sabemos, Pecco y yo, que somos de los pilotos más limpios en las carreras, y no tenía sentido que nos peleáramos. Por supuesto, nos encontraremos en otros circuitos, y estaremos luchando. Pero esto es algo que puede pasar y necesitamos pelear limpio; y por supuesto lo haremos.”
Viñales explica los momentos de tensión posteriores a la caída. “Las emociones, la adrenalina. Sobre todo, yo estaba enfadado porque tenía el potencial para ganar la carrera. Así que estaba muy disgustado, estaba muy enfadado con él [Bagnaia]; porque en ese momento estaba con la adrenalina. Pero después, seguimos adelante, nos dimos la mano. Sabemos que esto son las carreras, y necesitamos que haya respeto entre los pilotos.”
La motivación permanece intacta de cara a Mugello. “Estaba yendo muy rápido en estas vueltas. Pero no hay más que añadir, sólo seguir. Tenemos más hambre que nunca, porque sabemos que podemos ganar. Y eso es algo bueno, porque todo el tiempo tenemos el fuego dentro, y eso es fantástico.”
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