El piloto de Yamaha, Maverick Viñales, peleó ayer contra las Ducati e intentó no perder más posiciones al perder agarre en sus neumáticos. Su objetivo es luchar por el tercer puesto del Mundial.
Los dos podios consecutivos cosechados por Maverick Viñales en Silverstone y Misano prometían un buen final también en Aragón, sobre todo porque durante los entrenamientos tenía buen ritmo para la carrera. No obstante, el del Monster Energy Yamaha tuvo que hacer frente al poderío de las Ducati –recalcando la velocidad que tenían en la recta de atrás- y luchar a cuchillo por su posición. Aun así, el piloto español finalizó cuarto por detrás de las dos Desmosedici de Andrea Dovizioso y Jack Miller.
Antes de comenzar la carrera se supo que Maverick hizo una elección de neumáticos medio delantero y duro trasero. En el Diario AS le preguntaron el por qué. “La intención era hacer un poco como en Sachsenring. Tirar fuerte al principio”, dejó clara su estrategia el de Yamaha. “Aquí no se han peleado y han ido a por mí los de Ducati desde el principio. Hemos jugado la carta de tirar a muerte al principio, cuando podía mantener el 1:49 bajo, pero luego me costaba más. Hemos perdido mucho ‘grip’ en la entrada de curvas, y luego paso por curva, y si pierdes paso por curva con esta moto cuesta mucho. Me han pasado en la recta, pero si no me hubieran pasado en la recta, me habrían pasado frenando porque Miller frenaba muy bien. Pero hemos dado todo”, se conformó Viñales con el trabajo realizado en carrera.
“Sigo concentrado en mejorar mi pilotaje”
Haber luchado tanto para acabar fuera del podio podría suponer un gran descontento para el piloto, pero Viñales admite que cuando lo has dado todo no duele. “Yo lo he dado todo, he peleado con las Ducati, pero una cosa son los entrenamientos y otra las carreras. Todavía estamos lejos de Honda y tenemos que seguir trabajando. En Japón están trabajando muy duro y a nosotros sólo nos queda tener paciencia y dar mi máximo para, cuando tenga la moto, estar luchando por las carreras. Sigo concentrado en mejorar mi pilotaje, porque el día que tengamos la mejor arma la aprovecharemos”, zanjó respecto a las mejoras de la M1 llegando directamente desde la fábrica nipona.
La siguiente parada del Mundial se localiza en Buriram, Tailandia. Este trazado está predominado por las rectas, precisamente donde sufre la Yamaha: la aceleración. Sin embargo, Maverick es positivo pensando en esta cita. “En Tailandia estoy más positivo que aquí porque el año pasado hice una buena carrera y la moto no corre mucho menos que el año pasado. Fue una carrera muy buena, hay mucho sector de curva en Tailandia, y eso es lo que hay que trabajar, nuestros puntos fuertes, y en la recta nos acoplaremos un poco mejor”, señaló.
Lo último comentado por el de Roses fue el tema de la general, donde se encuentra quinto con 147 puntos y podría luchar por ser tercero o cuarto al final de la temporada. “El subcampeonato está muy lejos, porque es difícil recortar puntos a Dovi y tiene pistas muy buenas. En Buriram y Japón va muy fuerte. Tenemos muy cerca al tercero e intentaremos llegar ahí”, concluyó Viñales, que todavía puede escalar posiciones en la clasificación.
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