Los BMW C 400 X y C 400 GT se adaptan a la normativa Euro 5 e incluye un mejor equipamiento para ser un scooter más completo.
El mundo de las dos ruedas nos está dando en poco tiempo interesantes novedades. Más aún en el sector de la movilidad urbana, donde todas las marcas buscan ser cada vez más competitivas, tanto en características como en equipamiento. Este es el caso de BMW, que se ha puesto las pilas con sus scooters de media cilindrada para captar al sector.
Nos referimos a sus dos modelos de scooters de 350 cc: El C 400 X y el C 400 GT. Dos modelos con estilos totalmente opuestos pero que guardan similitudes en su parte ciclo. Ahora ha llegado el momento de adaptarlos a la normativa Euro 5, así como renovarlos estéticamente para situarlos en lo más alto del mercado.
Mismo motor, distinto carácter
Si nos centramos en el corazón de estos modelos, nos encontramos con un motor monocilíndrico de 350 cc, que rinde 34 cv de potencia a 7.500 rpm, y da un par de 35 Nm. Unas cifras que permiten a estos scooters moverse con total soltura dentro de las zonas urbanas. BMW ha mejorado este motor para ser más eficiente y tener un consumo más reducido.
Es así como declara unas cifras de 3,5 l/100km. Gracias a la gestión electrónica del acelerador (tecnología E-gas), la entrega de potencia es más armoniosa, lo que se traduce en un manejo más suave, incluso a baja velocidad. La adaptación a la Euro 5, y la consiguiente reducción de emisiones ha derivado en un nuevo catalizador y una nueva culata, más eficientes.
Control de estabilidad mejorado
Si nos centramos en la parte ciclo de estos modelos, vemos que BMW también ha hecho mejoras para tener una sensación de conducción más agradable. La suavidad que deriva del motor, se complementa con un nuevo embrague de muelles optimizados, lo que se traduce en una entrega más efectiva a la rueda trasera y un menor “tirón” en el arranque de la marcha.
El sistema de frenos también se actualiza, con nuevas pinzas de anclaje radial, más contundentes que las anteriores, y manetas regulables. Tecnológicamente, la marca alemana ha mejorado el sistema ASC (Control automático de estabilidad), siendo ahora capaz de recalibrarse de forma autónoma, incluso tras cambiar la rueda trasera. La respuesta es más fina y proporciona una mayor tracción en terrenos resbaladizos.
Flexcase de 45 litros
Los faros delanteros de ambos modelos mantienen la tecnología Full Led pero, como opcional, BMW nos ofrece la luz diurna de las mismas características. La pantalla, por su parte, se mantiene con la tecnología TFT de 6,5”, incluyendo funcionalidades de conectividad, como son escuchar música, hacer llamadas o navegar.
El hueco bajo el asiento se ha aumentado, pasando de los 31 litros del modelo anterior a los 45 litros actuales, y cuenta también con una iluminación mejorada para que el contenido sea perfectamente visible. Eso sí, aunque se haya aumentado el espacio, sigue sin caber un casco integral. Incluye en el mismo espacio una toma de corriente de 12 voltios.
Precios aún por confirmar
Como broche final, en la zona de la guantera nos encontramos con una toma USB, muy útil para, por ejemplo, conectar nuestro Smartphone. No nos hemos olvidado de los cambios estéticos, que en este caso son mínimos y se limitan a colores y gráficas. El C 400 GT estará disponible en Alpine White, Kallisto Grey y Triple Black.
Por su parte, el C 400 X, que mantiene el faro asimétrico icónico de BMW, estará disponible en Blackstorm metalizado, Gris granito y Style Sport, que incluiría el asiento con un diseño más deportivo. Estamos pendientes de que la marca bávara se pronuncie sobre precios y disponibilidad, pero estamos seguros que los cambios realizados, aunque mínimos, convierten a estos scooters en unos modelos más atractivos para el mercado.
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