La moto vuelve a ser una alternativa para la vuelta al cole, pero para que sea segura hay algunas cuestiones que debes tener en cuenta
Este septiembre, a causa del COVID, puede que algunos padres tengan dudas sobre si dejar a los chavales en el autobús escolar. Si no es posible llevarlos andando o en coche, la moto es una alternativa muy interesante, pero es necesario observar algunos requisitos. Legales y de sentido común, sin perder de vista el objetivo de que sean trayectos seguros.
Debe tener 7 años y llegar a las estriberas
Oficialmente, para poder llevar de paquete a un menor, este debe tener 12 años cumplidos. Sin embargo, la ley prevé una excepción, que permite a los padres, tutores o a otros adultos autorizados por aquellos, llevar a sus hijos si estos han cumplido 7 años. En cualquier caso, es requisito indispensable que el menor llegue con los pies a las estriberas. Esto, que puede parecer una tontería, no lo es tanto, pues hay importantes diferencias entre motos. Es posible que un niño llegue fácilmente a las estriberas de una moto desde los 5 añitos, y en la de sus padres le falten unos centímetros. En general, los scooters tienen el asiento trasero muy alto para hacer sitio al equipaje. Hay que probar por si acaso.
Es un asunto importante, el crío debe llegar con los pies para tener buena estabilidad sobre la moto y no ser un bulto suelto. También es muy recomendable que tenga un apoyo para la espalda, bien con un respaldo o un baúl.
El casco, siempre integral
Por supuesto, además de los 7 años cumplidos, el niño debe llevar un casco homologado. No hablamos de llevar a alguien cualquiera sino a nuestros hijos, por lo que hay que elegir lo mejor. Por eso, el casco debe ser integral, y debe ser de su talla. La oferta de cascos jet es más amplia, también son más baratos, más cómodos de poner y de llevar o guardar en la moto. Nadie quiere tener un accidente, pero ocurren, y yo no me lo perdonaría. Siempre integral.
Hay varios mecanismos de cierre, pero para ser el primer casco, yo recomiendo uno con correa micrométrica. No es tan seguro como el de doble anilla, pero para un recorrido corto y probablemente urbano, más que suficiente. Y sobre todo, muy fácil de ajustar y soltar para un niño. De todas formas, y sobre todo al principio, es mejor que confirmes que su casco está bien atado. Explícale que debe molestar pero no hacer daño, de manera que puedas pasar únicamente un dedo entre su cuello y el cierre. Con el tiempo ya será nuestro peque quien vaya adquiriendo práctica para ponerse el casco solo.
Aunque no es una cuestión relacionada con la seguridad vial sino con el COVID-19, recuerda que si no vais con casco integral, deberíais llevar puesta una mascarilla para evitar cualquier sanción.
Ropa adecuada y guantes
Cuando lleves a tu hijo o hija al colegio en moto, estarás haciendo algo más: educarle sobre cómo hay que ir en moto. Por eso es importante que vigiles el llevarle siempre con ropa adecuada. Seamos realistas, no es operativo que vaya con ropa técnica de moto para pasarse todo el día así en el colegio, pero al menos que el pantalón sea largo, con una chaqueta gruesa, guantes y calzado cerrado. Y desde luego nada de ir en camiseta o en chancletas.
Equiparse bien requiere su tiempo, es un ritual necesario aunque vayamos ahí al lado. Las prisas mañaneras no pueden ser excusa, es fundamental tomarse la molestia de hacer las cosas bien por si acaso. Y oye, que los compañeros vean a nuestro heredero quitarse o ponerse el casco y los guantes bajo nuestra atenta mirada, ¡también tendrá su puntito para él!
¿Cómo llevamos las cosas?
Si lo normal es llevar mochila, este año pesará aún más, ante la imposibilidad de compartir material con otros compañeros. En ningún caso será el piloto el que la lleve, salvo que se trate de un scooter y vaya colocada a sus pies. Lo mejor es llevarla en el cofre o en el baúl trasero, pues en la espalda de nuestro retoño los kilos de material trasladarán su centro de gravedad hacia atrás y le conferirán inestabilidad, justo cuando queremos lo contrario, formar un solo cuerpo junto con el nuestro sobre la moto.
Subir y bajar de la moto
No es fácil ser un buen paquete, y menos para un niño. Enséñale a agarrarse a tu cintura, a acompañarte en tus movimientos sobre la moto en las curvas, al acelerar y frenar. Recuérdale cómo debe subir y bajar de la moto, con movimientos verticales, sin empujarla hacia los lados, contigo encima de la moto. Fundamental que entienda que siempre debe contar con tu permiso. No será raro que intente bajarse de la moto en cuanto lleguéis al destino. No es suficiente con estar parados, necesitas prepararte y comprobar que es seguro, que no hay nada ni nadie que os ponga en peligro. Entrenad a subir y bajar de la moto desde ambos lados, y repítele una y otra vez que espere a tu orden, que sólo podrá bajarse y subirse cuando tú se lo indiques.
Las primeras veces serán algo difíciles, pero llevando la moto suavemente y sin prisas para que vaya haciéndose a la dinámica de ir de pasajero en una moto, conseguiremos que además de cumplir el objetivo de llevarle al colegio con seguridad, pueda disfrutar de la experiencia.
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