Álvaro Bautista se ha apuntado en Buriram su cuarta victoria en el campeonato del mundo de Superbikes. El español ha peleado con sus rivales durante la mitad de la carrera para acabar llevándose la victoria por más de 8 segundos. Pero ha sido la superioridad de la Ducati la que ha acaparado el protagonismo en las declaraciones posteriores.
La Panigale V4 R de Bautista es la más veloz de la parrilla, con una velocidad máxima de 314 kilómetros por hora. Esa diferencia ha provocado las quejas de Jonathan Rea, que cree que hay “una diferencia de 20 caballos”. El norirlandés lamenta que “no hay igualdad”, y opina que su Kawasaki no puede competir contra la moto del equipo italiano. No obstante, según recoge la web Paddock GP, Rea asegura que no tiene motivos para quejarse. “La moto era buena, el equipo hizo un buen trabajo y también llegué al límite. Pero no podemos dar veinte vueltas así. Cuando vi que ni siquiera podía mantener la aspiración en la recta, he bajado el ritmo. En distancia de carrera, vencer a la Ducati es imposible “, añadía Rea. “Puedo mantener la intensidad durante diez vueltas”, ha explicado, pero el final de carrera es más complicado para la Kawasaki.
“Rea buscaba el contacto”
Al inicio de la carrera, cuando ambos pilotos rodaban juntos, el piloto de la marca japonesa adelantó a Bautista en una acción que el español ha descrito como una maniobra “al estilo motocross”. El 19 ha asegurado que, después de irse largo, Rea le adelantó y, después de devolverle la pasada, al llegar a la curva tres, ha hecho “la trazada clásica”. Es decir, ha entrado un poco largo para salir más fuerte. Ahí, explica el español, el campeón estaba “por dentro” y ha entrado “muy veloz”. “En mi opinión, buscaba el contacto”, ha añadido, asegurando que “ha tenido suerte dado que estaba prácticamente en el suelo”.
Sobre esa maniobra, Jonathan Rea, según GPOne, solo ha dicho que ha sido “un adelantamiento normal” en el que “vio el espacio y se metió”. “He escuchado que me tocaba, pero no creo que haya nada que decir”, ha zanjado.
Después de ese lance, Bautista ha intentado “mantenerse concentrado” para no bajar el ritmo y alcanzar a Rea, que entonces lideraba la carrera. “Vuelta tras vuelta, su ritmo ha bajado, así que le he alcanzado”, comenta el español. A pesar de su victoria, el de Ducati ha explicado que “no estaba al 100%”, porque no podía “frenar igual que por la mañana”. “Parece que la gente solo ve lo que sucede en la recta”, reprochaba Bautista, refiriéndose a su superioridad en aceleración, “pero no se preguntan si es mérito del piloto o demérito de los otros equipos”. “Las pistas no están hechas solo con rectas, estamos mejorando, pero no es suficiente, debemos crecer para poder frenar mejor”, ha zanjado el que fuese piloto de MotoGP hasta 2018.
¿Podría Dorna imponer limitaciones a Ducati para igualar el campeonato?
Stefano Foti, Team Manager del Aruba Ducati, ha querido explicar la diferencia entre concesiones y limitaciones del motor porque son “dos cosas diferentes que pueden confundirse con facilidad”, según recoge GPOne. “Si después de las tres primeras carreras una marca tiene nueve puntos de ventaja sobre las demás, los perseguidores pueden tener concesiones especiales”, ha comentado, “como, por ejemplo, el uso de suspensiones nuevas”. “Esto es obviamente para favorecer que recuperen el terreno perdido”, ha añadido.
No obstante, la diferencia entre Ducati y Kawasaki no es tan grande como parece. Los puntos para los equipos se reparten de la siguiente manera: tres puntos para el primero, dos para el segundo y uno para el tercero. No se cuentan las carreras de Superpole.
“Por ahora, Ducati tiene nueve puntos, Kawasaki, siete (Rea 6 y Haslam 1) y Yamaha, dos (Lowes 1 y Melandri 1)”, expone Foti, “en la práctica, solo hay dos puntos de diferencia entre Ducati y Kawasaki”, añade. Por eso parece difícil que la ventaja de Ducati provoque concesiones para los demás después del tercer gran premio, que se celebrará en Aragón.
Las limitaciones de motores, sin embargo, son otro tema. “Dorna puede decidir intervenir, después de tres, cuatro o cinco carreras, para equilibrar el campeonato”, explica Foti. “Para hacerlo”, añade, “se basan en el número de victorias y distancia entre motos durante las carreras”. Esta medida, por lo tanto, queda en manos de la organización, que tendrá que tomar decisiones o esperar a que el campeonato avance.