Apodado como la estrella negra desde que llegase el paddock, el apartamento móvil de Valentino Rossi ha sido emulado desde entonces y hoy otros pilotos como Andrea Iannone, Aleix Espargaró, Maverick Viñales o los hermanos Márquez tienen un modelo similar con algunos detalles.
Se suele identificar rápido por tener muchos aficionados alrededor, o lo más cerca posible según la seguridad del circuito lo permita a lo largo del fin de semana, esperando la llegada o la salida de Valentino Rossi con la ilusión de conseguir un “selfie” o un autógrafo en la gorra o en la camiseta a juego. Es junto a la entrada del garaje de boxes, el lugar más concurrido por sus aficionados durante el Gran Premio.
En el gran premio de Jerez, por ejemplo, suele coger uno de los mejores sitios dentro del paddock, en un lugar poco accesible la mayoría del tiempo por vigilantes que impiden la entrada. Tiene su lógica como lugar necesario donde descansar después de un largo día de entrenamientos, trabajo de equipo y atención a la prensa. Otros pilotos, con menos recursos, suelen optar por un servicio de alquiler como el GPRooms o reservar el hotel más cercano al circuito para salir y entrar una vez acabe la acción.
Es una práctica habitual que los pilotos de MotoGP tengan mayores comodidades en las citas europeas. Un “hospitality” donde comer y hacer vida social más allá del box. Allí se reúnen miembros del equipo, responsables de neumáticos o electrónica, periodistas, acreditados y otras personas influyentes del entorno. Además de su “motorhome“, esa casa rodante propia que sólo pueden permitirse algunos pilotos, en especial los de MotoGP como Valentino Rossi, Marc Márquez (que comparte con su hermano) o Jorge Lorenzo. Durante años Viñales compartió el suyo con su amigo Jack Miller. Lo importante es que el piloto se sienta como en casa la mayor parte del tiempo.
Lo sorprendente de este modelo es que mientras viaja tiene una capacidad de 35 metros cuadrados, para pasar a 74 cuando una vez parado despliegue las plataformas laterales para maximizar el espacio. De esa forma se consigue un auténtico hogar con salón, cocina, dos baños y tres dormitorios. Los materiales y acabados de máxima calidad cuyo precio final, de 1 millón de euros, no está al alcance de cualquiera.
Además, este vídeo te permitirá descubrir el diseño interior del hogar de Valentino durante los Grandes Premios en Europa, “casaquarantasei” como lo denominó el propio piloto.
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