Enea Bastianini se despide de Moto2 por todo lo alto: con el título bajo el brazo. El italiano ha terminado quinto el Gran Premio de Portugal, pero esto le ha servido para proclamarse campeón y subir a MotoGP con una corona mundial en su palmarés.
Tres eran los candidatos a llevarse el título de Moto2. Enea Bastianini, Luca Marini y Sam Lowes. El italiano llegaba al frente de la clasificación al Gran Premio de Portugal, y era el que mejor lo tenía para conseguirlo. Como finalmente ha sido. Marini y Lowes han salido como un tiro y se han colocado al frente de la carrera rápidamente. Pero Lowes llegaba tocado y Marini no a podido evitar que lo adelantara Remy Gardner, quien se ha llevado la victoria. Por detrás, Bastianini cruzaba la meta en un quinto puesto que le daba la corona de Moto2.
‘La Bestia’ se mostraba exultante tras la carrera. En el parque cerrado, antes de subir al podio como Campeón del Mundo de Moto2, el italiano ha querido acordarse de todos los que han hecho posible este triunfo. “Es increíble. Ha sido una temporada fantástica con el equipo. Y difícil, porque con el Covid la verdad es que ha sido un año muy, muy difícil para todos. Quiero dedicarle esto a mi equipo, a mi novia, a mi entrenador… a todos, porque es un día fantástico para mí. Considero que es el mejor día de mi vida. Ha sido una gran carrera, imposible de ganar. Ha sido un poco desastrosa para mí, pero he podido terminar quinto”, ha dicho el piloto tras finalizar la carrera.
Algo más tarde, el italiano confesaba ante los micrófonos de DAZN como vivió la carrera. “Cuando vi que me adelantaban muchos pilotos, pensé ‘Tengo que dar más gas, empujar más’. Y al final la quinta posición es buena porque me convertí en Campeón del Mundo. Mi sueño se hizo realidad y quiero dedicarlo a todos. A mi familia, a mi equipo, a mi novia… El trabajo de mi equipo ha sido fantástico cada carrera. En un campeonato tan corto lo más importante era la constancia y la ausencia de accidentes“, ha dicho Enea Bastianini.
Una constancia que en temporadas anteriores ha sido su Talón de Aquiles y que, sin embargo, es de lo que se siente más orgulloso este año. “De lo que me siento más orgulloso es de haber sido constante toda la temporada, porque es algo que quizá me faltaba hasta el momento. He trabajado mucho durante el invierno con mi preparador. La satisfacción es grande”, confesaba el italiano tras hacerse la foto de los campeones.
“Convertirse en Campeón del Mundo significa haber marcado la diferencia en casi todas partes y haber cometido menos errores que otros. Siempre he sido voluble y, en cambio, este mundial la constancia me ha dado mucho. Luca Marini y Sam Lowes fueron excelentes rivales, difíciles de vencer. Fue agradable”, ha dicho el italiano en declaraciones recogidas por GPOne. “Este año logré tres victorias y siete podios. Es el mejor año de mi vida”.
Tras posar junto a Joan Mir y Albert Arenas, los campeones de MotoGP y Moto3, el italiano ha confesado que soñaba con ese momento. “Muchas veces veía como se terminaba la temporada y otros se hacían la foto. Y pensaba ‘Algún día estaré yo’. Estoy muy contento de estar aquí como Campeón del Mundo. Ha sido difícil pero lo hemos conseguido“, asegura.
La próxima temporada, ‘La Bestia’ dará el salto a MotoGP junto a Luca Marini para formar parte del Avintia. El italiano está motivado con su siguiente paso y confiesa que, darlo como campeón, era algo importante para él. “Eso son palabras muy grandes. Tendré que trabajar mucho durante este invierno para prepararme. Trataré de divertirme y aprender para adaptarme a la categoría de MotoGP rápidamente. Llevará tiempo pero estoy muy motivado. Es importante para mí llegar a MotoGP como Campeón del Mundo“, concluye.
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