
Neila participa en 2019 en su primera temporada mundialista en la categoría de Supersport 300. Estos días ha vivido una de las mejores experiencias para una piloto joven como ella.
Este año han sido cinco pilotos los que, con suerte, han disfrutado de cinco días intensos en Italia. Entre ellos ha estado Beatriz Neila; que junto con Kevin Sabatucci, Jacoppo Facco, Andy Verdoia y Finn De Bruin han entrenado a fondo y han aprendido muchas cosas nuevas para aplicar en su día a día como deportistas de élite. Tanto es así que la concentración y la intensidad han sido máximas durante todos los días que han estado disfrutando del Master Camp.
El primer día –y casi todos- estuvo acompañado de una sesión de gimnasio para calentar, para así luego dirigirse al Motor Ranch y hacer una sesión de Flat Track. Allí, Neila y sus compañeros tuvieron como instructor a Marco Belli, aunque también compartieron espacio con Franco Morbidelli (MotoGP) y Andrea Migno (Moto3) en un simulador. No todo es entrenar, y para coger fuerzas han visitado numerosas veces el Ristorante e Pizzeria da Rossi.

Más modalidades: velocidad y agua
El segundo día, los cinco aprendices visitaron el Autódromo de Modena donde se volvieron a encontrar con Migno y conocieron a Niccolò Antonelli (Moto3). En el circuito entrenaron en la especialidad de todos: el motociclismo de velocidad. Al día siguiente, Antonelli también les acompañó, pero para hacer una actividad distinta. Esta vez se trató de volver al Motor Ranch y luego a Galliano Park y pilotar unas MiniGP.
Sin lugar a dudas, el cuarto día se llevó la estrella. El escenario fue una playa de Pesaro donde Bea Neila, Sabatucci, Facco, De Bruin y Verdoia pilotaron y se divirtieron a los mandos de varias motos de agua -cosa que por ejemplo Neila no había hecho nunca- bajo la atenta mirada de Morbidelli y Lorenzo Baldassarri (Moto2). También tuvieron una sesión de calentamiento con Luca Marini (Moto2) y Carlo Casabianca antes de conocer por fin al ídolo de todos: Valentino Rossi. Con el piloto de Yamaha pudieron tener un entrenamiento privado y un rato de charla tranquilamente.

Final feliz
Todo buen momento termina. Sin embargo, este final supone algo muy bueno, ya que los jóvenes pilotos han podido aprender mucho a lo largo del Master Camp y les ayudará en un futuro. El último día tuvieron un pequeño acto de graduación para despedir a los pilotos de Supersport 300 que seguirán con la temporada la semana que viene en Jerez asistiendo a la quinta cita del año con dos carreras para recuperar la perdida en Imola.
“Es una pena terminar esta increíble experiencia”, decía Beatriz Neila. “Esta semana ha pasado muy rápido. Realmente disfruté todas las sesiones de entrenamiento, y la ceremonia al final fue genial. Vimos un vídeo de lo que hemos hecho y todos los recuerdos que tenemos, y fue muy bonito. Estoy muy contenta y una vez más me gustaría agradecer a Yamaha, a Valentino Rossi y el Master Camp”, finalizaba la madrileña, que no aparece en la clasificación general de su categoría por no haber puntuado todavía.
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