El piloto de MotoE y ESBK, Jordi Torres, concede una entrevista a Motosan antes de empezar a preparar la temporada de 2021. En la que intentará revalidar el título de MotoE mientras lo compagina con el proyecto de Honda y Laglisse en ESBK, con la esperanza de volver al WorldSBK.
Jordi Torres, (27 de agosto de 1987, Rubí, Barcelona), desde 2015 forma parte del paddock del WorldSBK aunque de manera puntual en 2018 volvió a MotoGP para sustituir a Tito Rabat. Para la temporada de 2020 emprendió nuevos retos participando de manera simultánea en ESBK y MotoE. Una temporada en MotoE en la que ha pasado de Rookie a campeón de la Copa de MotoE, un título que intentará defender en 2021 con el equipo de Sito Pons.
PREGUNTA. ¿Ha sido este año el más desafiante de tu carrera al compaginar varios campeonatos?
“La verdad es que pensaba que iba a ser más complicado, sobre todo al principio por la conducción tan distinta de MotoE. Es muy distinto a todo lo que habíamos conducido anteriormente con motores de combustión interna. Una conducción que no había probado antes, además todo cambiaba: peso distinto, carreras cortas, un formato de competición diferente a lo que estaba acostumbrado… Por eso pensaba que se me iba a hacer mucho más difícil. Aunque a la hora de la verdad, ha sido fácil ir dando saltos de una categoría a otra.
La clave ha sido que como con el equipo tenemos muy buen rollo, y hablamos muchísimo, hicimos un trabajo muy de visualizar y predecir un poco aquello que nos íbamos a encontrar encima de la moto. En resumen, un comportamiento muy diferente de una moto a otra, pensaba que iba a ser muy muy complicado y sin embargo, ha sido mucho más intuitivo de lo que nos esperábamos al principio. Y nos ha funcionado, no nos podemos quejar en absoluto”.
Una de las grandes ventajas es que la gran mayoría de los pilotos de la MotoE compaginemos otros campeonatos, por eso necesitamos todos esas primeras vueltas de adaptación cuando nos volvemos a subir en la MotoE. Necesitamos retomar la confianza y las sensaciones, aunque durante todo el fin de semana se tienen muy pocas vueltas. Por eso hablar con mi mecánico y mi técnico me ha servido tanto, sobre todo para saber que nos íbamos a encontrar y acelerar el proceso de adaptación.
De una MotoE a una de combustión interna siempre es más fácil. Lo difícil es al contrario, y desde el primer momento debes ser competitivo con una MotoE porque no tienes muchas vueltas y se acumula todo un poco. A fin de cuentas, una MotoE se lleva de una manera mucho más intuitiva de lo que puede parecer a simple vista”.
P. ¿Fue complicado tomar la decisión de renunciar a participar en el WorldSBK al coincidir calendario con MotoE?
“Si y no. Es verdad que llevo muchos años haciendo WorldSBK y es un campeonato del que estoy muy enamorado. A día de hoy quiero seguir luchando por tener una plaza en el WorldSBK. Quizá, en un futuro próximo si es posible porque la edad sigue pasando, vuelva otra vez a ese Mundial. Alguna lagrimilla solté en su día porque me gusta mucho, y se adecua mucho a lo que yo entiendo por conceptos de carrera y competición. Muchas veces en la vida no puedes seleccionar aquello que tu deseas, pero por otro lado tenía muchas ganas de probar una MotoE.
Así he suplido un poco esa carencia de no estar en SBK, estar en MotoE es una aventura distinta. Ni mejor ni peor. Estoy aprendiendo más como piloto al estar en MotoE, hemos tenido buenos frutos en este campeonato. MotoE me ha aportado muchas cosas y espero que me siga aportando porque en el mundo del motor nunca se deja de aprender.
Igualmente, como seguimos enrolados en el campeonato de España con el equipo Laglisse de Jaime Fernández Avilés, todavía sigo en contacto con el WorldSBK, al llevar motos con un comportamiento similar en cuanto a cilindrada y caballaje. Por eso no descarto hacer un wildcard con Laglisse en WorldSBK. La Honda que estamos llevando en el campeonato de España nos está funcionando realmente bien. Podríamos ser capaces de poder afrontar, en un futuro cercano, una prueba de WorldSBK como piloto invitado”.
P. Primer año en MotoE y te coronas como campeón del mundo, pero antes de todo eso, ¿cómo fue la adaptación a las motos eléctricas?
“Fue sorprendente, no nos esperábamos para nada ser campeones del mundo. En el 2020 no ha ganado el más rápido, ha ganado el más constante. Hemos puntuado en todas las carreras, hemos sabido frenarnos cuando teníamos más ritmo y nos hemos conformado con un tercero en vez de luchar por una victoria. Lo más importante era seguir sumando puntos, en un campeonato como este tener una progresión adecuada y firme ha sido mucho más importante que el querer ir rápido.
Ha sido clave el conocimiento de la moto, el entenderla y saber cómo funciona. Al principio de año no éramos muy competitivos y hemos acabado haciendo poles y ganando el campeonato. Eso quiere decir que hemos tenido una progresión ascendente y que le hemos cogido el pulso a la categoría. Para 2021 va a ser más difícil porque nuestros rivales van a estar a la altura”.
P. ¿Qué destacas de ellas?
“Lo que más destacaría de las MotoE durante el proceso de adaptación es la potencia que te entrega y eso es lo que tú gestionas con el acelerador. Eso es lo más distinto que te encuentras, pero luego encima de la moto todo fluye de manera natural como una moto más. Es más pesada y mucho más reactiva, y los comportamientos más lentos. Lo más complicado para acostumbrarte son las frenadas, arrastrar tanto peso y querer para en pocos metros tantos kilos y el límite de la frenada está marcado por un bloqueo, un front block que hace que se bloquee la rueda delantera y eso es lo que nos marca el límite. Luego cuando vas entrenado en curva y vas inclinando la moto se vuelve más delicado”.
P. En la segunda carrera de la temporada, ya subiste al podio en Jerez. Pero la victoria no llegó hasta Francia, en el momento justo. ¿Qué puntos han sido más decisivos: subir al podio o la regularidad en todo el campeonato?
“Ha sido una mezcla. El campeonato nos lo ha dado la regularidad y la constancia, sobre todo saber quedarnos donde estábamos sin ostentar a más con el riesgo de hacer un cero. Pero tengo que asumir que la victoria que hicimos en Le Mans fue contra todo pronóstico y ni soñando se me aparece todo tan perfecto. Que se cayera Matteo Ferreri y Dominque Aegerter, que mis máximos rivales hicieran dos ceros justo en un circuito donde habíamos hecho una pole y teníamos buen ritmo tanto que conseguimos la victoria, eso nos facilitó el campeonato.
Se nos alinearon los planetas para que pudiéramos lograr ese campeonato que hubiera sido igual de merecido para mis contrincantes tanto para Ferreri, Aegerter o Casadei. Sin embargo, los rivales se fueron al suelo y nosotros nos quedamos en pista, supimos gestionar los nervios y la tensión. El trabajo de mi equipo con la pizarra fue muy bueno. Esa victoria nos valdría casi al 100% por el campeonato. Pese a que al día siguiente teníamos otra carrera, en esa segunda carrera teníamos solo que no fallar ni dormirnos en los laureles, y mucho menos un cero. Esa victoria vino en el momento justo y nos dio el campeonato, gracias también a la constancia de todo el año”.
P. De Rookie a campeón, ¿Ya has asimilado que eres campeón del mundo?
“Soy una persona bastante normal, ser campeón del mundo no me ha cambiado en nada. Somos campeones, pero al igual que no nos lo esperábamos al principio de año ni mucho menos, a día de hoy tampoco. Hemos tenido algo de suerte y hemos trabajado muy bien, lo hemos logrado pero no te quita una carga de encima. Sabemos que este año tenemos otra vez que luchar por ello y se va a tornar todo mucho más difícil así que seguimos trabajando.
Estamos pensando mucho en cómo organizarnos y plantear los entrenamientos, mejorar la fórmula que tuvimos el año pasado para que este año sea todo un poquito más competitivo. Además, tenemos la presión de que partimos como favoritos y eso nos va a condicionar mucho durante la temporada. Hemos hecho una gran temporada con una gran recompensa, no tenemos que asimilar nada. Por ser campeones no tenemos que marcarnos un galón ni que nos den un trofeo extra, lo único que tenemos que hacer es seguir trabajando”.
P. “Mi equipo necesitaba ganar el campeonato” dijiste tras coronarte como campeón de la Copa de MotoE ¿cómo ha sido trabajar con el equipo de Sito Pons?
“Ha sido genial. La forma de trabajar con Sito y con el equipo ha sido el principal motivo por la que continuo en MotoE, no he estado en un equipo tan humano ni con tanta cercanía como este. He disfrutado muchísimo durante todo el año, lo he dicho desde el primer día. Me sentí en un buen grupo de trabajo, tanto el equipo de MotoE como el de Moto2 están bastante unidos y nos llevamos todos super bien. Ese ha sido el motivo principal por el que he querido hacer otro año en MotoE, porque estaba con el equipo de Sito Pons. Gracias a trabajar en un equipo tan bueno, tan humilde y tan profesional ha hecho que siga aquí. Hemos trabajado tan bien que quiero repetir con ellos”.
P. Algo tienen las MotoE que hacen que continues en 2021…
“Las MotoE tienen un gran atractivo que son las carreras cortas y dinámicas, carreras en las que puede pasar de todo y en las que pueden ganar muchos pilotos con gran experiencia. Todos somos aptos y tenemos algo que demostrar. Además, todos llevamos la misma montura y trabajamos con las mismas armas. Todo depende al final de la forma de trabajar dentro del box de cada uno y de cómo lo apliques en pista. Debes tener mucho temple, saber que acciones hacer porque cada pequeño error se paga muy caro. Tienes pocas vueltas en las que tienes que tomar decisiones muy importantes que pueden comprometer a otros pilotos. Tienen muchos alicientes que lo hacen muy atractivo, aunque a mitad de temporada no estaba muy convencido. Sin embargo, el formato me ha ido gustando cada vez más y por eso continuo”.
P. ¿Qué esperas del segundo año con el Pons Racing?
“Es difícil saber qué esperar, hacer un segundo año es un arma de doble filo: puede ir bien como puede ir mal. Más en este campeonato todo esto es bastante loco y puede pasar de todo. Es una combinación de la experiencia y la lotería. No nos esperamos nada del segundo año, sabemos que puede ir bien como puede ir mal. Quizá traigan algún neumático que nos perjudique, o algún setting distinto al que no nos acabemos de adaptar. Pueden pasar mil cosas, por eso tenemos que estar preparados para todo.
Sobre todo me gustaría, y espero, poder luchar por las posiciones delanteras. Aunque sé que no va a ser fácil y vamos a ser el objetivo número 1 de nuestros rivales. En una categoría donde un hachazo puede suponer una caída y un cero. Somos conscientes de que va a ser difícil defender el campeonato, pero nos sobran ganas de poder revalidar el título”.
P. Has vuelto después de 8 años a disputar el campeonato de España de Superbike con Laglisse, ¿cómo ha sido volver con Laglisse de la mano de Honda al ESBK?
“El campeonato de España lo tenía como olvidado, hacía años que sentía la esencia de la competición. A todos niveles. Desde el chaval que va con los padres e intentan que aprenda para que el día de mañana pueda ser un gran piloto. A pilotos experimentados que se ganan la vida trabajando de ello. El campeonato de España abarca desde lo más pequeño a lo más grande.
En nuestro caso, el proyecto que tiene Laglisse con Honda, el compromiso con Honda es lo que nos resultó más atractivo la verdad. Una montura nueva, un motor nuevo y una moto nueva. Todo supone que hay que desarrollar la moto y durante todo el año hemos hecho muy buenos entrenamientos y test privados. Estamos muy contentos con el trabajo de Honda, y yo, sobre todo con el trabajo de Laglisse. Hemos conseguido tener un paquete muy competitivo donde en cada prueba hemos estado delante. Además, Dunlop se ha portado genial trayendo un material muy competitivo con el que poder disputar el campeonato de España.
Ha sido un año interesante donde he aprendido mucho también con la Honda en el campeonato de España. Aunque de hacer MotoE con Michelin al ESBK con Dunlop, hace que ambas conducciones sean totalmente distintas. Sin embargo, ambas marcas funcionan muy bien en cada campeonato y no he tenido ningún problema. Volver de la mano de Laglisse es genial, ya trabajé con ellos en 2011 y 2012 y fuimos campeones de España y campeones de Europa. Son un equipo súper profesional y siempre he tenido muy buen rollo con ellos. No podía volver al campeonato de España con un equipo mejor que ellos, con un proyecto muy bonito y ambicioso con Honda”.
P. Has dicho en más de una ocasión que MotoGP no es para ti, que sientes como tu casa WorldSBK. ¿Eso quiere decir que volverás a WorldSBK?
“Ojala. No sé por donde pasará mi futuro, pero sí que es verdad que me siento mucho más afín, muchísimo más, con el WorldSBK que con MotoGP. Quizá MotoGP no se adapta a mi estilo de entender las carreras, el WorldSBK es más familiar con pilotos más cercanos. Hay menos prensa alrededor y se hace mucho más hincapié en todo lo que pasa dentro de la pista. Eso son las carreras. Luego fuera de pista si te quieres ir a cenar con un piloto rival, o con un grupito de pilotos de tu misma nacionalidad pues no pasa nada. Eso podría ser impensable en MotoGP, porque estás rodeado de muchas polémicas y de mucha salsa rosa.
El WorldSBK carece de ello y simplemente centra la atención en las carreras. Durante las carreras no existen los amigos, pero fuera de ellas somos todos pilotos y personas. Entre nosotros no existe rivalidad más allá de la pista. Es lo que más me atrae de WorldSBK, lo mismo pasa en el ESBK, eso es lo que me gusta. Hay piques, pero fuera de pista de habla y tan amigos, no genera más discusión de la haya en pista”.
P. Tras una temporada ajetreada entre MotoE y ESBK, ¿en 2021 volverás a compaginar campeonatos?
“Si. Aunque en lo que respecta a MotoE, no era una cosa que me planteaba a largo plazo ni mucho menos. Queríamos hacer un año y ya veríamos. Al principio era simplemente curiosidad, sin ninguna proyección. Sin embargo, me ha gustado tanto el formato como trabajar con el equipo de Sito que repito. En cuanto al ESBK, al ser un proyecto nuevo al que se requiere un desarrollo ya se planteó el contrato para varios años, así que seguiré también en ESBK con la Honda que funciona genial y a la que podemos sacar más partido”.
P. “Los sueños se hacen realidad” dijiste nada más llegar al parque cerrado tras ser campeón de la Copa de MotoE. ¿Qué más sueños te quedan por cumplir?
“Profesión aparte, me queda por formar una familia y tener descendencia a la que aplicar toda mi sabiduría. Formar familia y ser un padre estupendo. También hipotecarme al comprar una casa. En cuanto a mi profesión, mi mayor deseo es continuar a este nivel y seguir teniendo esta ilusión y esta curiosidad como me ha pasado con MotoE. Ha sido una bocanada de aire fresco que me ha abierto nuevas puertas. No sabemos si será el futuro o no, pero a día de hoy es una vertiente tanto para el mundo de la competición como para la calle. Cada vez hay más vehículos eléctricos y formar parte del espectáculo/desarrollo de estas motos eléctricas me enorgullece y me hace ilusión. El día que no tenga esta ilusión será hora de retirarse, pero a día de hoy me queda aún mucha metralla por cumplir”.
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