La bomba que soltó MotorSport Magazine no dejó indiferente a nadie. El medio de comunicación desvelaba algunas irregularidades en la presión de los neumáticos por parte de algunos pilotos.
Entre los pilotos acusados de forma directa de salir a pista con una presión inferior al límite establecido está Pecco Bagnaia, ganador del GP de España. No obstante, las acusaciones afectan a otros pilotos como son Jorge Martín y Álex Rins que, supuestamente, habrían corrido con la presión de los neumáticos delanteros por debajo del límite legal. Por último, los datos apuntaban a que Andrea Dovizioso corrió con el neumático trasero también por debajo del límite.
Gigi Dall’Igna salió en defensa de su piloto, Pecco Bagnaia reiterando que son comparten esos datos con el resto de los equipos, DORNA e IRTA. Además, Piero Taramasso, responsable de Michelin, afirma las palabras de jefe de Ducati y detalla en profundidad los datos publicados por MotorSport Magazine insistiendo en que “los equipos respetan los valores mínimos” y nunca podrían en peligro la integridad física de ningún piloto.
En la actualidad el reglamento técnico de MotoGP no marca ningún límite con el parámetro de la presión de los neumáticos, y simplemente establece en el artículo 2.4.4.9.1: “Los neumáticos deben usarse de acuerdo con los parámetros recomendados que se han acordado en consulta con el proveedor oficial de neumáticos, el director técnico y los organizadores“.
Así pues, hay una norma que establece la obligación de respetar los parámetros recomendados, pero cuando no se respetan, ¿no se toman medidas al respecto? La información publicada por Mat Oxley incluía una copia del informe oficial de Michelín, informe de dudosa procedencia ya que supuestamente es un documento privado y no tendría que haber salido a la luz. La presión recomendad en Jerez era de 1’90 bar en los neumáticos delanteros y de 1’70 bar en los traseros, parámetros que debían mantenerse al menos durante 12 de las 25 vueltas de la carrera.
“El protocolo aún no se ha adoptado como forma de control”
Para poder aclarar la situación y entender porque no ha habido ninguna penalización por estas irregularidades, que, por otra parte, reclamaban des de MotorSport Magazine y que, además, tienen que ver con una cuestión de seguridad, Motociclismo.com ha hablado el director técnico de MotoGP, Danny Aldridge. Inicialmente, afirma que el informe publicado en MotorSport Magazine “es un protocolo que estamos considerando adoptar en el futuro, con suerte en 2023. No se aplica en 2022 por muchas razones“.
Aldridge estaba al tanto de estas irregularidades en la presión de los neumáticos. “Recibo el informe después de cada Gran Premio. Como todo fabricante. El propósito del informe es comprender si el protocolo propuesto funcionará. La información es dada libremente por cada fabricante, por lo que los datos no pueden ser verificados oficialmente”.
“No es una informe oficial, no puede utilizarse para sancionar”
La pregunta que se hace todo el mundo es, ¿por qué esas irregularidades no han sido sancionadas? “La información proporcionada no es un informe oficial y, por lo tanto, no puede utilizarse para sancionar. Una vez más, como indiqué anteriormente, el protocolo aún no se ha adoptado como forma de control y no lo hará hasta que estemos completamente satisfechos con el procedimiento“.
La información publicada hace referencia a un pacto de caballeros. “Nuestra intención es tener un sistema más seguro para monitorear la presión de los neumáticos en 2023. Sin embargo, esto no significa que tengamos un problema en 2022, ya que las presiones actualmente son monitoreadas por el personal de Michelin, y se ha hecho lo mismo desde que Bridgestone fue el proveedor oficial de neumáticos“. Para terminar, Danny Aldridge confirma que “no hay necesidad de una investigación” por parte de la dirección técnica de MotoGP debido a lo ya expuesto por Aldridge.