Para Arón Canet parece haber sido un acierto subir a Moto2, principalmente por el peso. Algo que no echa de menos de la categoría pequeña.
El Campeonato del Mundo de MotoGP, al igual que el resto de competiciones, se encuentra paralizado. Aun así, al menos las categorías de Moto3 y Moto2 tuvieron la oportunidad de disputar la que fue la primera cita en Qatar de un calendario lleno de incertidumbre. Mientras tanto, en la categoría intermedia uno de los focos principales estaba fijado en Arón Canet, principalmente por su debut en Moto2 tras proclamarse subcampeón del mundo de las motos pequeñas la pasada temporada.
El piloto valenciano daba el salto este año de la mano de un equipo con gran experiencia en este campeonato, Aspar Team, por lo que su actuación estaba en el punto de mira en la primera carrera del año. Ello, tras impresionar y comenzar los entrenamientos de pre-temporada a un nivel muy alto y con un ritmo bastante prometedor. Se trata de una figura que destaca en el paddock por estar continuamente bromeando con los medios, y también detrás de las cámaras.
Como todo piloto que cambia de estructura de un año para otro, un aspecto fundamental se trata de la conexión con los miembros del equipo para favorecer un buen ambiente. Algo a lo que el propio Canet ha dedicado un especial interés siendo él mismo. “Lo que yo busco es hacer piña desde el primer momento. Lo más importante en cada equipo es que tener una pequeña familia allí y apoyarte con ellos. Así que no hay nada mejor que entrar haciendo el tonto y con risas porque así toda la gente se abre“, aseguró para los medios de DAZN. Además, gracias a ello parece haber encajado perfectamente en su nueva estructura, tanto personal como profesionalmente.
Es así que el piloto de Moto2 consiguió en su carrera de debut en Moto2 el octavo puesto y no muy lejos de la cabeza. Nada más poner punto y final a esta primera cita, Canet reconoció haber “acabado dentro del objetivo“. También el valenciano considera que le ha sentado bien este cambio de categoría. “Me esperaba estar mucho más atrás y mucho peor. Pero desde el primer momento me adapté bien y las motos no tienen ningún gran secreto. Aquí tienes que trabajar, sacar tu ritmo. Es cierto que en carrera me muevo muy bien y tengo ese ritmo para estar delante, pero no soy un piloto de explosión como Jorge Martín con tantas poles“.
“Estos kilos de más no están pagados”
Sin embargo, hay algo de lo que Arón Canet está más orgulloso aún con este cambio de categoría, y es concretamente por el peso. Ya en las primeras declaraciones del fin de semana en Qatar, no dejó de hacer mención a ello. Desde que se encuentra en la categoría intermedia su peso oscila entre 65 y 66 kilos frente a los 61/62 que requería tener en Moto3, hecho que le hizo “sufrir muchísimo“.
“En Moto3 tenía ese peso, sin comer nada, me mareaba levantándome del sofá y muchas veces caía al suelo. Iba a dormir y no me podía dormir porque tenía hambre. Cosas extremas. En Moto3 nadie lo ha pasado tan mal como yo, es muy bonito ser el gordo de la categoría y que te pasen en la recta“, confesó el piloto. En cambio, la situación ha cambiado mucho para él, y ahora se siente mucho más tranquilo siendo uno de los que menos pesan en Moto2. “Estos kilos de más no están pagados”, aseguraba para DAZN.
A su vez, otro hecho que ha llamado bastante la atención del piloto es por la impresión de su gran tatuaje. El propio Arón Canet reconoce hacerse el tatuaje como un reflejo de “personalidad“. Con originalidad, el nuevo casco de esta temporada presenta un rasgo diferente. “También tengo la cabeza tatuada, y la parte de la nuca del casco es el tatuaje de la cabeza, como una continuación“.
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