Tras la nefasta actuación de la fábrica japonesa en Sachsenring, en un par de días Bradl trabajará para evolucionar la moto.
Con la mirada puesta en Silverstone y en el parón del verano. Así se encuentra Honda actualmente. Tras un fin de semana para el olvido en Sachsering con Marc Márquez siendo incapaz de transmitir seguridad encima de la moto, la única solución a corto plazo que existe en la fábrica japonesa es evolucionar cuanto antes en muchísimos aspectos para que el catalán y sus compañeros de marca puedan rendir acorde a las expectativas.
Precisamente, esta semana Stefan Bradl puede ondear en dichos aspectos al contar con dos jornadas de test en Misano los días 20 y 21 de junio. El actual piloto probador de Repsol Honda adquiere ahora mismo un papel con una importancia suprema: el de convencer a Marc Márquez de que la fábrica japonesa quiere campeonar con él.
Tras el batacazo de Sachsering y sin tiempo para encarar el Gran Premio de los Países Bajos en Assen, Bradl intentará en Misano probar algunas cosas de cara al reinicio del Campeonato tras el parón veraniego. En Honda saben que no pueden quedarse sin hacer nada, más bien todo lo contrario. Están en una etapa donde el tiempo corre a contra corriente.
Con Joan Mir y Álex Rins fuera de combate, el futuro de Honda recae en Bradl. La cita que tiene tanto el martes como el miércoles determinará cómo puede terminar la temporada 2023 la fábrica japonesa. La tarea del piloto alemán es muy clara: probar determinados reglajes y evoluciones para la vuelta en Silverstone allá por el mes de septiembre. Y es que Honda, si quiere hacer una segunda parte de temporada decente, necesita un cambio radical.
Sobre todo, y entre otras cosas, porque Marc Márquez puede estar buscando soluciones para no cumplir con su último año de contrato con Honda. Un contrato que vincula a ambas partes hasta 2024 y que, con ayuda de su manager Jimmy Martínez, se estudia cómo una rescisión. El futuro a corto plazo del piloto catalán podría estar muy lejos de Honda si la marca no le da, tanto a él como a sus compañeros, una moto estable, segura y fiable.
En los test estará Álvaro Bautista
En un contexto completamente opuesto estará en Misano el actual Campeón de WorldSBK. Álvaro Bautista hace tiempo que marcó en rojo esta semana, y es que como premio a su Mundial de 2023 Ducati le dejará probar una MotoGP. El piloto español está cuajando una excelente temporada en WorldSKB y gozará la semana que entra de una oportunidad única: probar una moto invencible en MotoGP.
“Después de ganar el campeonato en WorldSBK, le pedí a Ducati probar la MotoGP porque, desde afuera, parece una moto realmente divertida. Haremos el test muy pronto. No lo hago con la intención de hacer un ‘wild card’. Me gustaría probar y ver qué pasa. Me tomo el test como un premio“, explicaba el propio Bautista a WorldSBK sobre sus sensaciones ante esta jornada de test en Misano.
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