El Repsol Honda Team viaja ya a Tailandia para comenzar la gira asiática que ocupará el próximo mes de competición. Marc Márquez podría hacerse con su octavo título este fin de semana mientras Lorenzo sigue explotando al máximo el potencial de la RC213V
El Mundial sigue su curso hacia Tailandia. La gira asiática ha llegado ya para dar paso a la última etapa de esta temporada y el Repsol Honda Team lo afronta con la mejor de las esperanzas. Marc Márquez podría ser campeón este fin de semana en Buriram, un circuito en el que ya dominó el año pasado, llevándose la pole, la vuelta rápida y una victoria que le dio el match ball para Japón. Mientras tanto, Jorge Lorenzo visitará por primera vez el circuito tailandés para participar en una carrera.
La pasada temporada, dada la caída en la primera curva de Motorland y su posterior lesión en la muñeca, el mallorquín no pudo participar en esta primera parada de la gira. Sin embargo, el de Palma llega con las mejores sensaciones a Tailandia y teniendo en cuenta lo fuerte que ha demostrado ser Honda en este circuito que se incorporó al calendario la temporada pasada.
“Hace un año no tuvimos el mejor de los fines de semana en Tailandia, al sufrir una gran caída que me impidió participar en la carrera. Tengo ganas de correr en ese circuito, donde ya vimos el año pasado con Marc que la Honda RC213V va fuerte. Después de un Gran Premio difícil en Aragón, espero que podamos tener un buen fin de semana. Durante los entrenamientos demostramos que nuestro ritmo está mejorando y el objetivo para Tailandia es explotar ese potencial”, indicaba Lorenzo.
Márquez, a tiro de su octavo título mundialista
Dos puntos. Eso es lo que le hace falta a Marc Márquez para ser campeón este domingo. Al de Cervera le basta con sacarle dos puntos en carrera a Andrea Dovizioso, con el que su distancia de puntos en el campeonato sube ya hasta los 98 puntos. La victoria sería la sentencia definitiva para el campeonato, independientemente de lo que haga Dovizioso. En el caso de que Márquez quede segundo o tercero, la única condición sería que el italiano esté siempre por detrás de la Honda para no alargar más el alirón.
De conseguir un nuevo título, Márquez cosecharía su octavo mundial a sus 26 años, todo un récord en la historia del motociclismo mundial, quedándose a tan sólo uno de alcanzar a Valentino Rossi, el ídolo de masas por excelencia en la competición. A pesar de la oportunidad tan clara, Marc Márquez indica que su modelo de trabajo será el mismo y que el “enfoque no cambia”, el objetivo es y ha sido siempre la victoria, independientemente de la clasificación general de puntos.
“Tuvimos un fin de semana fantástico en Aragón y fue un placer ganar delante de los aficionados de casa. Quiero mantener esa confianza y energía en Tailandia, para hacer un buen Gran Premio. A pesar de las circunstancias, nuestro enfoque no cambia; haremos nuestro trabajo para ser lo más fuertes posible el domingo. El año pasado tuvimos una carrera muy emocionante, así que espero que podamos ofrecer otro gran espectáculo a los aficionados”, apunta Márquez.
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