Tras un año histórico el pasado 2014, los hermanos Márquez han vuelto a cosechar un nuevo doblete para su familia en el Gran Premio de Francia, el tercero desde la entrada de Álex en el mundial de motociclismo.
El Gran Premio de Francia terminó con una especie de maldición para los españoles en la categoría intermedia. Desde el pasado Gran Premio de Japón del año 2017, ninguno de nuestros pilotos pisaba los más alto del cajón. En aquel entonces fue Álex Márquez el último en subir. Un año y 215 días después, la historia se repite. El piloto del Estrella Galicia 0.0 volvió a reencontrarse con la victoria después de tanto tiempo, dando al motociclismo español una nueva alegría. Además, la fiesta fue mayor con el podio de Jorge Navarro y Augusto Fernández, un nuevo triplete para España que no contemplaba desde Motorland 2013, con Nico Terol al frente.
Pero en Le Mans se dio otro hecho histórico para nuestro país, un hecho que no visualizábamos desde 2014. Una vez más, y ya van tres, los hermanos Márquez volvieron a ganar el mismo día. La alegría por la victoria de Álex Márquez se enfureció más con el triunfo de su hermano, Marc Márquez, que completaba su segundo consecutivo después de ganar en Jerez. El mayor de la familia comentó que la motivación a salir a pista se había intensificado a ver a su hermano ganar, pudiendo repetir los dobletes de Barcelona y Assen en el año 2014. Año donde ambos se proclamaron campeones del mundo: Álex en Moto3 y Marc con se segundo en MotoGP. Un hecho inaudito que muchos creen que no se volverá a repetir, ¿o si?.
It's a family double for the Marquez brothers! 🤝#Moto2 winner @alexmarquez73 congratulates @marcmarquez93 on his #MotoGP victory! 🏆#FrenchGP 🇫🇷 pic.twitter.com/ElNAoIqEFy
— MotoGP™🏁 (@MotoGP) May 19, 2019
Cinco años han transcurrido para volver a ver a los hermanos celebrar sus sendos triunfos en el parque cerrado, en parte dado por la sequía de españoles en la categoría intermedia. La última victoria de Álex se dio en Japón 2017 y, en ese mismo año, con los primeros puestos de Jerez y Barcelona, Marc no pudo rematarlo. En el Gran Premio de España fue superado por Dani Pedrosa, en aquel entonces su compañero, y en Barcelona Andrea Dovizioso se impuso con su Ducati y un ritmo imparable. Fue ese mismo año cuando el italiano le disputó el mundial hasta Valencia.
2014, un sueño cumplido
Era algo que muchos lo imaginaban en su cabeza, pero pocos creían que se pudiera dar. Que unos hermanos fueran campeones el mismo año. Se llegó a pensar con los Espargaró, pero nunca sucedió y la llegada de los Márquez provocó el mismo debate en el paddock. Sin embargo, su trabajo, sensatez y humildad les llevaron a lo más alto. Aquel año, Marc Márquez llegaba como campeón y mejor rookie de MotoGP pero ya desde el principio de la temporada, en Austin, encabezó un dominio de diez victorias consecutivas que no se había visto nunca antes. O al menos no con un piloto de apenas dos años en la categoría reina.
A Álex Márquez le costó mucho más encaminar su corona de Moto3. De hecho, no fue hasta Valencia cuando se confirmó el doblete de mundiales para la familia. Ese día en Cheste se hizo historia del motociclismo, pero antes la temporada había sido muy dura y trabajada. El pequeño de los Márquez sumó diez podios y tres victorias esa temporada, coincidiendo con su hermano en dos: Barcelona y Holanda. En el primero, el del GP de Catalunya, Álex consiguió la victoria por delante de Enea Bastianini y Efren Vázquez; mientras, su hermano completó el hito con un triunfo al superar a Valentino Rossi y Dani Pedrosa. Ya en Assen, el #73 ganó a Álex Rins y Miguel Oliviera y el #93 volvió a imponerse ante su compañero de equipo y Dovizioso.
¿Campeones en 2019?
Puede sonar a locura o sueño, pero lo cierto es que ambos tienen posibilidades reales y son favoritos en sus respectivas categorías. Marc Márquez es líder del mundial con tres carreras ganadas de las cinco disputadas y su ritmo con la Honda de este año hace pensar que podría llegar a ser imbatible. Por ahora, sólo Andrea Dovizioso está cerca de luchar cuerpo a cuerpo con él. Están separados por ocho puntos en la general y la constancia de ambos podría volver a repetir la situación del año 2017, cuando el español se llevó el título en Valencia.
Para Álex Márquez la ecuación es algo más complicada. Lorenzo Baldassarri es el líder en solitario de la categoría intermedia. Ha ganado todas las carreras salvo los dos ceros de Austin y Jerez, pero su competitividad e intensidad demostrada sobre su moto da pensar que podría ocupar el sitio de Pecco Bagnaia como campeón y dar el tercer título mundialista a la VR46 Riders Academy. El pequeño de la dinastía Márquez marcha cuarto en la clasificación, a 14 puntos del italiano, con Luthi y Jorge Navarro por encima. Con un doblete que no se repetía desde 2014, da pensar que los hermanos podrían volver a unir fuerzas para conseguir unos nuevos mundiales, especialmente antes de que Álex de el paso a la categoría reina, unos rumores que se han ido incrementando con el paso de los días y las declaraciones de Alzamora, que le acercan al Pramac Ducati.
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