La acción volverá este fin de semana con el primer Gran Premio de MotoGP de la temporada donde habrá que seguir un estricto protocolo y en el que no veremos el habitual podio.
Este fin de semana, por fin, tras más de siete meses sin acción en pista, las motos volverán a rugir sus motores en el primer Gran Premio de la temporada. El Circuito de Jerez-Ángel Nieto será el encargado de acoger la que sería la cita inaugural de MotoGP este año. Una carrera que tendrá que seguir una serie de protocolos de seguridad con motivo de la pandemia por COVID-19 que ha apartado al mundo de cualquier vida normal y que dejará una visión de las carreras como nunca antes se había visto.
Sin duda, esta crisis sanitaria, en algunos puntos del planeta sin controlar aun, ha dejado unas consecuencias que deben evitar ser repetidas. Es por ello que, para que se pueda celebrar el mundial de MotoGP, las autoridades y la organización del mundial han llevado a cabo unos estrictos protocolos para cada carrera. De esta manera, y en caso de que se de un caso de coronavirus en el paddock., inmediatamente se sabría qué hacer.
Controles médicos
El primer paso que se ha tenido que seguir ha sido la realización de un test PCR a todo el personal acreditado, pilotos, mecánicos, trabajadores de Dorna. Además, se les mantendrá aislados hasta que termine el Gran Premio, de esta manera, los pilotos podrán que evitar cualquier foco de contagio. A su vez, cualquier zona común del paddock tendrá que desinfectarse constantemente para reducir el riesgo de contagio.
Al igual que cualquier ciudadano, todas las personas acreditadas para el Gran Premio tendrán que dotarse de material de protección individual tales como son las mascarillas o cualquier elemento que garantice un lavado de manos continuo. Se mantendrán también en el interior del circuito las medidas de distanciamiento social ya establecidas en cualquier otro ámbito. A su vez, cada día todos el personal tendrá que realizarse un control médico para comprobar que no tengan síntomas de coronavirus.
Ante la aparición de algún tipo de indicio o síntoma relacionado con la COVID-19, la persona será enviada a un puesto de confinamiento en el centro médico. Si fuera necesario, el paciente sería trasladado a un hospital local para la realización de pruebas adicionales. Si los resultados fueran negativos la persona volvería al circuito y, en caso de ser positivo, sería confinada junto con su equipo, en caso de que hubiese más positivos.
Personal de pista y podio
En cuanto a la organización del Gran Premio muchas personas tendrán que seguir la carrera desde sus casas. La limitación del personal hace que desaparezcan los paragüeros y las paragüeras de la parrilla de salida y, por el contrario, este trabajo lo realizará un miembro del equipo del piloto como se ha visto en ocasiones en otras competiciones y que será el encargado de atender las necesidades del piloto. El mismo caso ocurre en el personal del podio.
De este modo, los pilotos no llevarán a cabo la habitual ceremonia del podio sino que tendrán que salir con los trofeos ya entregados y enseñarlos al público. En el podio no habrá presencia ni de azafatas ni de dignatarios o autoridades lo cuales como hemos nombrado antes serán miembros del equipo de los tres primeros pilotos. Además, se establecerá una distancia de separación de dos metros entre los tres pilotos. Asimismo, en el parque cerrado todo el personal deberá llevar mascarilla siempre que así se indique y se creará una distancia de seguridad entre piloto y los medios de la organización.
Una de las cuestiones más comentadas es la de los comisarios de pista. En caso de que el piloto sufra una caída, los comisarios y todo aquel personal de pista podrá centrarse única y exclusivamente en la moto, en ningún momento podrán tocar al piloto accidentado. Tan solo el personal sanitario podrá tratar a los pilotos. La Clínica Mobile presentará unos horarios y atenciones más ajustados para evitar cualquier tipo de aglomeración.
La vida en el paddock
Los pilotos tendrán que llevar a cabo una especie de confinamiento mientras dure el Gran Premio. De este modo, el personal autorizado dentro del paddock no podrá abandonar el recinto si no es para, al final del día, poder desplazarse al hotel en el que se encuentren alojados. A pesar de ello, podrán realizar las actividades típicas como hacer deporte en el circuito siempre y cuando sea de forma individual o en caso de realizarlo con otra persona respetar la distancia de dos metros de seguridad. Si fuera necesario realizar reuniones durante el desarrollo de la prueba, estas deberán hacerse preferiblemente mediante videoconferencia.
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