El piloto francés terminó séptimo en el GP de Portugal, con una Yamaha que ‘tiene pequeños aspectos que mejorar’.
En el Gran Premio de Portugal, en Portimao, en un circuito favorable para él, Fabio Quartararo logró finalizar la carrera del domingo séptimo, sumando nueve puntos. Sin embargo, se trataba de un resultado lejos de otros años, teniendo en cuenta la situación que vive el francés con la Yamaha, que aún está detrás de las motos europeas. El piloto explica cómo vivió el fin de semana, así como qué mejoras podría tener la japonesa, a nuestro colaborador Manuel Pecino.
De entrada, las expectativas para el piloto francés eran mayores para el domingo, teniendo en cuenta el resultado del sábado. “Considerando el sprint de ayer, en términos de distancia, estaba convencido de que terminaría más cerca de los primeros, aunque la posición no me sorprende. Sin embargo, hemos recopilado muchos datos y ahora esperamos tomar un paso adelante”.
De cara a los tests, Fabio Quartararo solo pensaba y se preocupaba en una cosa: el tiempo, que podría determinar sus días de pruebas. “¿Mi prioridad en los test de mañana? Mucho dependerá del tiempo, porque las previsiones no pintan bien. Espero que podamos aprovechar el día al máximo porque tenemos algunas cosas que probar”.
Crisis en Yamaha: ‘No tenemos ningún problema grave, hay muchos pequeños’
Fabio Quartararo se encuentra con una Yamaha que no termina de funcionar pero, sin embargo, reconoce que no hay ningún fallo grave al que ponerle solución, sino que hay más de uno. “No se trata sólo de una cuestión de aerodinámica. No tenemos ningún problema grave o grande que resolver, hay muchos pequeños aspectos que debemos mejorar paso a paso. Por ejemplo, necesitamos mejorar el agarre en la rueda trasera, en la electrónica, en la geometría y en la posición”.
Aún así, la situación se vuelve más complicada para el francés, además de que cuentan con solo dos motos para mejorar. “Hay numerosos detalles que arreglar y en mi opinión es peor que un solo fallo importante. Por eso habrá que tener paciencia, ya que con sólo dos motos es difícil ser rápido en resolverlo. Con el fabricante hablamos de un hipotético equipo satélite de apoyo, pero no puedo decir nada más“.
El campeón del mundo de 2021 entregó un casco especial al jefe de equipo, Diego Gubellini, en el que decía ‘Esperamos pasar más años juntos’. Sin embargo, él no fue el único que lo recibió y tenía que haber sido entregado meses antes de este GP de Portugal. “En realidad regalé 25 a los chicos del equipo, desde luego no con las mismas palabras para todos. En este caso debería haber sido entregado el pasado campeonato en Valencia. Digamos que he construido una muy buena relación con algunos de los miembros del equipo, concretamente con aquellos con los que inicié el camino en MotoGP. A ellos les dedico esta frase”.
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