Valentino Rossi pudo participar este pasado sábado en las 12 Horas del Golfo, quedándose a un paso del podio en la clasificación general. El italiano pudo hablar también de su marca, Yamaha, y del trabajo pendiente para 2021.
Como gran aficionado al mundo del motor, Valentino Rossi siempre aprovecha las vacaciones de invierno para dedicar su tiempo a otros deportes a los que, durante la temporada del Mundial de MotoGP, no se puede dedicar. Este pasado sábado se quedó a las puertas del un podio en en la clasificación general de las 12 Horas del Golfo, un rally en el que compitió con su hermano, Luca Marini, y su gran amigo, Uccio Salucci. Una jornada que el propio piloto calificó como “un día hermoso” y muy divertido, corriendo con un Ferrari 488 GT3 del equipo Kessel Racing.
Pero, además de hablar de las 12 Horas del Golfo, el nueve veces campeón del mundo, pudo dedicar unas palabras a su marca en en Mundial de MotoGP, Yamaha, que tiene por delante un 2021 lleno de trabajo si quiere volver a luchar por un título de campeón. Ahora, Valentino Rossi vestirá los colores de la estructura satélite del fabricante japonés, comenzando una nueva etapa con el Petronas, pero siempre con material oficial, teniendo en cuenta su punto de vista y sus datos para seguir desarrollando la moto en la medida de lo posible, teniendo en cuenta que el motor no se podrá cambiar esta temporada -consecuencia de la crisis ocasionada por la pandemia del coronavirus-. Y lo cierto es que, esta temporada, los problemas de Yamaha con el motor han sido graves.
“2021 será un desafío difícil”
“Hasta 2016 la moto era muy competitiva, podría haber ganado carreras y títulos. A partir de ese momento tuvimos más dificultades. Para ser competitivos tenemos que hacer lo que los otros fabricantes han hecho, es decir, mejorar”, comentaba Valentino Rossi, en declaraciones recogidas por Corsedimoto, sobre el trabajo pendiente de la marca japonesa para estos próximos test de invierno, antes de dar comienzo a una nueva temporada.
Pero el motor no será el único problema para Yamaha. Según apunta Valentino Rossi, otra de las grandes debilidades de la M1 y otro de los grandes quebraderos de cabeza de esta pasada temporada es el nuevo neumático de Michelin. “Realmente estamos pasando un momento difícil con el agarre del neumático trasero. Si no logramos que funcione correctamente, es muy difícil montar en la moto y ser competitivos. Este es el punto más importante, sin olvidar que debemos mejorar nuestra velocidad máxima, no sólo con un motor más potente, sino también con una mejor aerodinámica”, comenta el italiano.
“2021 será un desafío difícil. Tenemos que estar preparados desde la primera carrera. Tengo que trabajar mucho en mí mismo y mejorar en algunas áreas, como la clasificación, que es muy importante en este momento”, sentencia Valentino Rossi, con ganas de empezar de nuevo en el Mundial de MotoGP, donde le espera una nueva etapa.
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