Stoner ha asistido al evento por excelencia del motociclismo en Italia (EICMA), y ha hablado sobre cómo se encuentra actualmente y cómo ve era de MotoGP actual.
Los cascos son un elemento primordial para la seguridad de los pilotos en pista, en esta ocasión Stoner ha sido invitado el EICMA como invitado de la marca que, ha estrenado su nuevo modelo X-804 RS. El australiano reconoce en exclusiva para GPONE la gran evolución de la marca, aunque en sus inicios su calidad no era la mejor, “no era muy cómodo como casco“. ” Ver crecer a Nolan como marca conmigo, tan rápidamente, fue increíble. Para mi este nuevo modelo está en un nivel diferente“, añade
Stoner padece síndrome de fatiga crónica y confiesa que “durante los últimos cinco años no he podido hacer prácticamente nada“. “A causa de mis problemas, ciertos días no podía ni levantarme del sofá y lo he pasado muy mal. Cinco años que han sido un gran reto“, continúa diciendo el australiano que, se contagió de COVID tres veces en 2021.
El motociclismo ha sido su vida y lo seguirá siendo, “me gustaría implicarme de otras maneras“. Sus conocimientos y experiencias podrían ayudar a jóvenes promesas a adquirir conocimientos muy valiosos pues el #27 cree que “todavía tengo mucha información importante que compartir“. “No me gusta implicarme en algo si no puedo hacerlo lo mejor posible. Debo tener cuidado con las decisiones que tomo y el compromiso que decido poner en ellas. He mejorado en el último año y medio, pero sinceramente aún no estoy ni siquiera cerca del 100%“, agrega.
“Me gustaría ver a los pilotos obligados a trabajar duro con la moto“
En la era actual de MotoGP con la llegada de la aerodinámica, el piloto está perdiendo protagonismo, “no cuestionaría el talento de los pilotos sino hasta qué punto estos pilotos pueden realmente mostrar su talento“. Casey cree que ahora mismo todo el poder “está en manos de los ingenieros” y, es algo que no le gusta. “Me gustaría ver a los pilotos obligados a trabajar duro con la moto, a temerla, a pensar en cómo resolver los problemas, los caballitos, los derrapes. Ahora no pueden hacer nada, sólo tienen botones que apretar y un freno del que tirar. Y así no pueden mostrar su potencial“, señala.
El de Australia comenta que “ya no estamos en presencia de una moto cuando miro MotoGP“. Además, considera que cuando él corría también tenía demasiada electrónica, “es algo que belleza y poesía del motociclismo al piloto“. “Sería suficiente poner dos ruedas extra en esas motos para tener un Fórmula1 delante de ellas. Tenemos que parar con esto, que algunos llaman progreso. “Estamos llevando el deporte hacia atrás y no hacia adelante, hay que pararlo“, sentencia.
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