Después de empezar a preparar la próxima temporada con un prototipo en los test de Brno, Yamaha llevará una evolución del mismo a las siguientes pruebas que tendrán lugar en Misano
Yamaha ya ha empezado a prepararse para el próximo curso. Tras la mala temporada que están volviendo a pasar, lejos de luchar por el campeonato, y tras las insistencias de Valentino Rossi y Maverick Viñales, la fábrica de Iwata se ha puesto manos a la obra para solucionar los problemas de motor. Ya desde Brno se ha podido ver a los pilotos oficiales probar el prototipo de 2020, aunque las sensaciones por parte del italiano y el español no fueron las mejores, o al menos no se les vio del todo entusiasmados. Aún así, Rossi miró el lado positivo: «De todos modos poder probar algo nuevo es una señal de que algo ha cambiado».
Y es que con estos comentarios, desde la fábrica quieren seguir con la evolución del motor de cara a la próxima temporada. Lo de Brno parece ser sólo el principio de todo el trabajo que tienen por delante en los próximos test: dos en Misano a final de mes, los dos días de Valencia tras acabar la competición y los de Jerez el mismo mes de noviembre. Takahiro Sumi, jefe del proyecto de Yamaha en MotoGP, confirmó a GPone.com que probarán una evolución del prototipo 2020 ya en Misano para seguir mejorando con los comentarios de Viñales y Rossi.
«Nuestros pilotos nos dieron buenas indicaciones»
«En los test de Brno llevamos una versión temprana del motor 2020, pero era sólo un primer prototipo y esas pruebas se usaron sobre todo para confirmar la dirección adecuada. Nuestros pilotos nos dieron buenas indicaciones y estamos listos para dar un paso más. Nuestro objetivo es aprovechar al máximo cada día de pruebas y ya puedo confirmar que traeremos una nueva evolución del motor a los test de Misano», confirmaba Takahiro Sumi.
Además, también ha admitido la mala situación por la que ha pasado Yamaha y sus cambios internos antes de comenzar a pensar en el 2020: «Ha habido cambios este año, después de los desastrosos resultados de la temporada pasada. Este GP -Brno- fue crítico para nosotros, pero también un punto de inflexión. Sabíamos que antes de cambiar la moto tendríamos que cambiar nosotros mismos. Hubo muchos cambios menores en la empresa. También perdimos nuestra dirección en diferentes áreas después del cambio de proveedor de neumáticos -ahora Michelin- El número de problemas aumentó e identificamos las prioridades en las que necesitábamos invertir».
La potencia, una asignatura pendiente
Si da algo se han quejado durante estos meses Maverick Viñales y Valentino Rossi es la falta de potencia y velocidad del motor 2019. Y es por eso que, esta asignatura, es la principal a tener en cuenta de cara al próximo curso, la única clave a resolver si de verdad quieren optar al título y, especialmente, enfrentarse al nivel tan superior que ha adoptado la Honda en esta temporada.
«Nuestra desventaja en la velocidad punta ha aumentado y esto hace que sea más difícil para nuestros pilotos luchar contra sus oponentes. La potencia nunca ha sido nuestro punto fuerte, pero estamos tratando de mejorar la apariencia al encontrar un compromiso para no afectar negativamente la capacidad de conducción de la M1. Este es nuestro objetivo», zanjaba Sumi.
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