
Dani Pedrosa se enfrenta a un fin de semana intenso en la última cita del Lamborghini Super Trofeo de la temporada.
Dani Pedrosa vuelve a ponerse a los mandos del Lamborghini Huracán Super Trofeo EVO2. Aunque aparecía inscrito como wild card en el Gran Premio de la Comunidad Valenciana, KTM retiró la solicitud hace unos días. El motivo fue que Pedrosa, que compagina sus labores de probador con los austriacos con el automovilismo, estaría compitiendo en la última ronda del Lamborghini Super Trofeo, que se celebra en Portimao.
La última cita de la temporada será más intensa de lo habitual, ya que engloba el final del Super Trofeo Europe y las Super Trofeo Grand Finals. En total, Dani Pedrosa tomará parte en cuatro carreras durante este fin de semana, que comenzó el jueves con una jornada de entrenamientos.
Ayer viernes, Pedrosa ya disputó las dos primeras carreras de este fin de semana. Pedrosa llevaba cuatro meses sin subirse a su coche y eso complicó un poco las cosas al principio. «Después de mucho tiempo sin rodar con el coche, ha sido un poco más difícil coger el ritmo de carrera. Especialmente, pasar directamente de los entrenamientos a carrera, ha sido un cambio importante», reconocía el piloto
El ex piloto de MotoGP tuvo la oportunidad de seguir adaptándose, además de conducir en mojado, situación a la que aún no se había enfrentado. «En la primera carrera, la pista estaba mojada y hemos salido con neumáticos de lluvia. Era mi primera vez con estas condiciones«, ha reconocido Dani Pedrosa después de concluir octavo con lluvia.
Pedrosa fue el encargado de conducir durante la segunda mitad de la carrera, por lo tenía que adaptarse rápido a las nuevas condiciones. «Me he subido al coche en la segunda parte de carrera, por lo que tenía que intentar coger rápidamente el ritmo. No tenía experiencia en esta situación y tanto la trazada, como la forma de usar los frenos, el gas y el volante resultaba muy diferente a rodar en seco».
En la segunda carrera disputada ayer, Pedrosa fue el encargado de tomar la salida. «Lo cierto es que he sido un poco precavido, ya que en la última carrera choqué con los pilotos de delante a causa de un accidente que había delante de mí y esta vez quería terminar la carrera«, ha explicado.
Además, se sumaba el hecho de la poca experiencia de Pedrosa en las salidas tipo ‘Rolling Start’. «Es en movimiento y yo no tengo ninguna experiencia en ese tipo de salidas. No he conseguido ver el semáforo verde, porque estaba a mitad de grupo. Solo en la salida y primera curva he perdido unas cuatro o cinco posiciones«, ha dicho el piloto, que finalmente terminó sexto.
Al final, Pedrosa reconoce que «el balance es bueno, pero me quedo con que aún no tengo experiencia en las salidas y ese es mi punto débil ahora mismo». Además, también ha reconocido que «me he encontrado más cómodo en lluvia que en seco. Me ha dado la sensación de que en lluvia, la línea e incluso la manera de llevar el coche es más parecida a la moto«.
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