Difícil día de entrenamientos para Valentino Rossi en Sachsenring, el campeón italiano no pudo pasar directamente a la Q2 por nueve milésimas pese a poner el máximo empeño.
Valentino Rossi tuvo que pasar de nuevo por el mal trago de la Q1 al ver como se quedaba fuera en los últimos instantes por apenas nueve milésimas. Eso sí, diferente a como le fue en Mugello o en Assen, esta vez superó dicha Q1 con el mejor tiempo para clasificarse para la Q2 junto a Nakagami. El gran damnificado fue su compatriota, el líder de Ducati, Andrea Dovizioso, que quedó tercero de la Q1 y saldrá mañana en la 13ª posición.
Lamentablemente, durante la Q1 Valentino Rossi se fue al suelo en la curva 1, dañando levemente su moto. Eso comprometió sus opciones de sacar un buen resultado en la Q2 donde realmente sólo pudo hacer un ataque real al crono, pese a que sus mecánicos e incluso los de su compañero Maverick Viñales, estuvieron ayudando a ponerla a punto lo antes posible. “Mi equipo ha hecho un gran trabajo para dejar la moto que me gustaba lista para la Q2″ – Felicitó Rossi a los suyos según recoge Motorsport, ya que el italiano se sentía mucho mejor con esa moto que con la segunda. Aunque de igual forma, reconoció que tras su caída en la Q1 perdió algo de sensaciones para la Q2. “Sólo he podido hacer un intento y salgo desde la cuarta fila, así que nada muy allá, especialmente en este circuito”. Rossi partirá en 11ª posición lejos de la pole de Marc Márquez, en un circuito bastante estrecho y donde en la primera curva se forma un gran embudo.
Toca de nuevo la remontada del domingo
Tal y como os hemos contado en el Análisis de Ritmos, hay cuatro pilotos que se destacan del resto. Valentino Rossi, que acostumbra a hacer grandes remontadas el domingo, tiene claro que no optará al podio viendo el nivel de Marquez, Rins y sus compañeros de marca, Viñales y Quartararo: “Los primeros cuatro van más rápido. Luchar por el podio lo veo muy difícil porque los que salen delante de mí van más rápido que yo” aunque es optimista para conseguir puntuar lo más arriba posible, ya que ha reconocido que se siente “algo mejor” que en Assen, con “mejor ritmo”. Para la carrera de mañana: “Mi ritmo no es tan malo pese a que sufrí a una vuelta con el neumático blando”, haciendo al ataque final en la Q2.
Valentino Rossi sigue sin encontrarse cómodo con su Yamaha M1, pese a que ayer reconocía sentirla más suya. Viñales y Quartararo han estado entre los más rápidos tanto a una vuelta como en ritmo con su misma moto. Al preguntarle sobre como es su relación con su M1, ha comentado que “es más similar a la que tienes con tu novia que con tu madre, porque tu madre te lo consiente todo. Me gustaría que fuese más una relación más como con mi madre, pero creo que ahora está más cerca a la relación con mi novia, más difícil de manejar porque a veces ella dice no”. Una relación tormentosa desde hace unos años, de amor/odio ya que no está consiguiendo las victorias de antaño. Por último ha recordado que mañana las condiciones climatológicas serán diferentes y habrá que estar muy atentos, “parece que podría llover y las temperaturas son más bajas” como reconocía a los micrófonos de Gpone.
Valentino Rossi se enfrenta a una carrera más importante de lo que parece. Con sus tres ceros consecutivos (Mugello, Cataluña y Assen), ha igualado su peor racha de abandonos, como la que sufrió en Ducati. Para mañana el objetivo será puntuar entre los 5/6 primeros al menos. Otro mal resultado sería un duro varapalo antes de las vacaciones de verano, donde el campeón italiano tendría mucho tiempo para pensar. Mejor irse con buen sabor de boca para volver con optimismo en agosto. La Yamaha está funcionando en Sachsenring, como también lo hizo en Assen, Rossi sólo necesita un buen resultado para volver a convencerse de ello.
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