Maverick Viñales valora el trabajo pendiente de Yamaha para la próxima temporada en una entrevista en el diario Las Provincias. El español comenta la entrada de Fabio Quartararo al equipo y la consecuente salida de Rossi al satélite, eso sí, todavía como ‘piloto oficial’ de la marca.
Está claro que Maverick Viñales ha superado este 2020 como su año más complicado en el Mundial de MotoGP. Las cosas nunca salieron bien: los fallos en los motores, los nuevos neumáticos de Michelin… todo justo en el año que Marc Márquez ha fallado y, posiblemente, ante su mejor opción para ser campeón del mundo de MotoGP. No ha podido ser y, por eso, el español ya piensa en la siguiente temporada y, sobre todo, en el trabajo que la fábrica japonesa tiene pendiente, especialmente a la hora de resolver tantos problemas encontrados en el último año.
Por ello, el de Roses hace una valoración del año 2020, en una entrevista a Las Provincias en un acto promocional celebrado recientemente en Valencia: “Para Yamaha ha sido un año muy difícil, porque empezamos arriba del todo, incluso hicimos el récord de Jerez. Estábamos contentos con la moto, pero luego vinieron Brno y Austria, circuitos complicados para nosotros. No dimos con la tecla para mejorar, fuimos para abajo y ya no levantamos cabeza nunca más”.
Los problemas comenzaron con las roturas de motores en la marca, siendo Valentino Rossi el desencadenante en la segunda carrera de Jerez. Tras la prueba, mucha incertidumbre y un problema con una válvula de los motores que, algunas marcas como Honda o Ducati, no permitieron que la fábrica de Iwata cambiaran. Con esto, Viñales y Morbidelli habían descorchado todos sus motores ya en agosto, a tres meses del final de la temporada -e incluso descartando alguno-. “Hice todo el año, las 14 carreras, con solo dos motores. Estábamos al límite, no sabía cuándo iban a petar”, recuerda Viñales, con el milagro de poder salvar uno de los motores tras el tremendo incidente en el Red Bull Ring, cuando el español se tiró de la moto al quedarse sin frenos.
La salida de Valentino Rossi del box de Yamaha
“Espero que Yamaha evolucione el 100% y podamos darlo todo. Está claro que no es posible volver a lo que teníamos en 2019, pero seguramente sí vamos a mejorar. Si la COVID lo permite, tendremos seis días de test”, explica el piloto de Yamaha, esperando que el 2021 sea el añado de los cambios o, en este caso, de las mejoras. “También hay que mejorar bastante de chasis. Sobre todo cuando intentamos comparar, nuestra moto es poco ágil o difícil. Creo que es donde nos centraremos para conseguir que sea más competitiva”, pide el español a su marca.
Además, esta temporada estará marcada por la salida de Valentino Rossi del equipo oficial con destino al satélite, al Petronas. Ahora, con la llegada de Fabio Quartararo, Viñales se convierte en el primer piloto del equipo y, por ello, espera que le escuchen más: “Será muy diferente, ya veremos si positivo o negativo. Por lo que siento para mí, va a ser positivo porque al final ha cambiado el desarrollo de la moto. Intentaremos mejorar con Fabio en el sentido de trabajar un poco más juntos y dar con la tecla. Valentino también contribuía en un papel muy importante para Yamaha. Y al final va a estar al lado del box, es oficial igual, va a continuar ahí”.
Aunque las palabras de Valentino Rossi y, sobre todo, de su experiencia al probar nuevas piezas: “No lo sé, la verdad, es difícil decirlo. Cada uno da un poco su opinión y este año Yamaha ha hecho lo que ha querido”.
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