Praga, la antigua marca checoslovaca, vuelve a lo grande con la nueva ZS 800. Solo se fabricarán 28 unidades, propulsadas por un motor Kawasaki y cargada con elementos de titanio y fibra de carbono
La firma Praga se encuentra actualmente en medio de una fase de renacimiento. La marca checa fundada en 1907 ya lanzó el año pasado un coche llamado Bohema, con un precio de 1 millón de euros y propulsado por el motor del Nissan GT-R . En esta ocasión, el fabricante presenta un vehículo de dos ruedas también con motor japones. Efectivamente, esta ZS 800 está equipada con un motor Kawasaki W 800. De hecho, es una elección bastante acertada cuando se desea dotar a un motor de una identidad clásica y al mismo tiempo que tenga prestaciones suficientes. Ciertamente no es el bloque más moderno y potente que existe, pero es muy fiable y económico de mantener. Con sus 47 cv y 65 Nm de par máximo, el bicilíndrico en línea de 773 cc refrigerado por aire cumple de sobra, teniendo en cuenta sus livianos 142 Kg de peso.
La ZS 800 es una bobber de estilo neo-retro que se inspira en las líneas de la BD 500, producida entre 1928 y 1933 en Praga. Como buena bobber, esta moto está montada sobre un chasis tubular rígido. Adopta un sistema de suspensión original, tanto delantero como trasero. La Praga ZS 800 recibe una horquilla de titanio de tipo paralelogramo que además, incorpora una unidad Öhlins totalmente ajustable. En la parte trasera, la suspensión está conectada directamente entre el chasis y el asiento. Para absorber las imperfecciones de la carretera de manera óptima, Öhlins también se encarga de absorber los golpes con un amortiguador bajo el asiento. Para mantener su identidad retro, el sistema de frenado es de tambores y no de discos.
El uso de materiales premium, además de otorgarle un diseño único, ahorran peso. El chasis está fabricado en acero duraluminio, un acero a la vez fino y resistente. El mecanizado artesanal del mismo, ha llevado más de 300 horas por unidad. Hay que destacar también que el chasis incorpora los 11,5 litros de combustible que aporta el depósito. Lo que parece el tanque en las fotos es solo una tapa. La línea de escape está completamente fabricada en titanio. Por si fuera poco, las llantas son 100% de fibra de carbono trenzado.
En resumen, la Praga ZS 800 es una obra maestra por la que tendrás que pagar nada menos que 86.000 euros, si eres uno de los 28 afortunados que se se hace con una de las 28 unidades que se van a fabricar.
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