Xkuty es un ciclomotor eléctrico fabricado en Xeraco (Valencia), por una empresa familiar situada en el polígono industrial, a pocos metros de la estación de ferrocarril. Está teniendo una gran acogida no sólo en España, también en Alemania y en Holanda
Su diseño es sencillo y funcional. Está concebida como una moto para la ciudad y los desplazamientos cortos, ya que la velocidad máxima es de 50 km/h. Se fabrica en tres colores; blanco, negro y gris. El toque de color lo aportan los manguitos y el asiento. La Xkuty se recarga enchufándola a conectores de 220 vatios. Además, es muy silenciosa.
Se controla a través de una pantalla LCD frontal, es ligera y muy fácil de usar. Su autonomía es de 100 kilómetros, según su batería de reserva. Su precio, incluida matriculación e impuestos, es de 2.700 euros. «No somos chinos, ni la moto es china», se apresura a aclarar la gerente, María José Bofí. En realidad, el origen de la Xkuty hay que buscarlo en Ibi (Alicante), ya que fue concebida allí por unos estudiantes como proyecto final de carrera, e incluso ellos crearon una empresa. Pero corría el año 2013, nadie apostaba entonces por la movilidad eléctrica y la firma entró en concurso de acreedores.
Un nuevo rumbo para la Xkuty
A finales de 2019 se embarcaron en esta aventura empresarial María José y su marido, Francisco García. Compraron las patentes e hicieron cambios en el modelo. Al diseño original le añadieron varios elementos, como los intermitentes. Pero luego llegó la pandemia, que supuso un paréntesis, y aprovecharon para seguir con papeleos, licencias y homologaciones. En la plantilla son sólo cuatro personas, María José, Francisco, el hijo de ambos, Alejandro, que se encarga de la electrónica, y un comercial, Frank, de origen alemán. El año pasado vendieron unas 60 unidades en España. Calculan que ya hay en el mercado unas 200 motos. «Tienen muy buena acogida en Alemania y en Holanda, y estamos en negociaciones en el mercado italiano», comenta María José.
Actualmente tienen dos tiendas, una en Gandia y otra en el Prat de Llobregat, en Barcelona. Además, quieren abrir otra en Casablanca, en Marruecos. También reciben pedidos por internet. Los empresarios destacan que este ciclomotor apenas tiene piezas de plástico, cosa que garantiza su perdurabilidad. Otra ventaja, según relatan, es que los recambios no hay que buscarlos en China, por lo que si existe algún problema los plazos de reparación y entrega se acortan mucho. Lo único que llega del mercado asiático, aseguran, son conectores y unos cables.
La empresa no para de buscar nuevas posibilidades para dar más versatilidad a la Xkuty. Desde hace un tiempo están probando adaptarla como un vehículo para la Policía Local, especialmente para agentes de pueblos pequeños, con dos maletines a los lados. También han diseñado una estación de carga de energía solar, pensada para quien tenga más espacio.
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