El pequeño de los Márquez vivió una situación similar a la de Rins la temporada pasada, decidiendo marchar de Honda.
La noticia de la semana la protagonizó Álex Rins. El piloto español y Yamaha confirmaban lo que estaba siendo un rumor más que contrastado durante todo el verano. Tras estar únicamente media temporada en el equipo del LCR Honda, la decisión de Rins estaba más que consensuada: quería ir a un equipo oficial y ese sería Yamaha. Una situación, la de marcharse del LCR, que vivió en primera persona Álex Márquez hace escasos meses.
“Entiendo la decisión de Rins, pero estoy triste por el equipo, el LCR, porque he pasado mucho tiempo con ellos y estoy triste de que vaya a cambiar de equipo después de sólo medio año con ellos”, explica el catalán ante los medios de comunicación ya en el circuito de Silverstone. Un Márquez que, por su parte, está ahora con el Gresini Racing y aún no tiene asegurada al 100% su continuidad en el equipo de cara al 2024.
Aun así, Márquez es uno de los pilotos que mejor conoce y entiende a la perfección lo que ha podido vivir Rins estos meses. Todo, antes de una grave lesión que está dejando ‘out’ al expiloto de Suzuki. “Entiendo el movimiento porque, al final, un equipo oficial siempre es más atractivo, y si te fijas en la situación de ambas motos, es más o menos similar. Y en un equipo oficial, puedes ver más cosas”.
El mal momento de Honda, un efecto colateral en la marcha de Rins a Yamaha.
Insistiendo aún más por el tema, Márquez explica que no le sorprendió ver al propio Rins quejándose de la moto. Honda no está pasando un buen momento, y pese a que Rins logró ganar en Austin, la realidad es que la marca japonesa nunca antes había estado tan mal en el Mundial de MotoGP.
Álex Márquez, por último, también ha añadido que no le sorprendió ver a Rins quejándose de la moto. “Es lo que me pasó a mí. No me pilló por sorpresa cuando se quejó de eso a principios de temporada”.
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