Durante la presentación del Repsol Honda, el vigente campeón del mundo ha destacado el nivel de su nuevo compañero de equipo, a la vez que ha reconocido que este invierno ha sido uno de los más complicados y sacrificados de su trayectoria. Respecto a su lesión, espera llegar al 100% a la primera carrera del Mundial.
El equipo Repsol Honda ha echado a rodar hoy con motivo de su presentación. La temporada 2019, en la que tantos pilotos tienen depositadas altas expectativas, Marc Márquez asume el reto de defender el título conseguido en 2018. Por el momento, el nuevo año ha empezado con algunas complicaciones para el cinco veces campeón del mundo de MotoGP. La lesión en el hombro que arrastró durante gran parte de la temporada pasada ha sido más complicada de lo que parecía, lo cuál, a su vez, ha hecho que su recuperación haya sido más lenta de lo previsto. “Cuando me hicieron la operación vieron que había más cosas rotas de las que pensábamos. A partir de ahí empezó una recuperación larga, de muchas horas de trabajo al día sin saltarme ni un día, lo cual ha sido más difícil a nivel mental que físico”, describió Márquez, que también reconoció que ahora ya está mejor anímicamente y que ha ganado movilidad en el hombro. El objetivo, según él, es “llegar en condiciones a Qatar y estar lo mejor posible en Sepang”.
Respecto a la relación que pueda tener con su nuevo compañero de equipo, Márquez ha recalcado que, por encima de la rivalidad con Lorenzo está el equipo. “Tanto Jorge como yo lucharemos por el mismo objetivo, pero los dos queremos lo mejor para el Repsol Honda. Tendremos nuestros más y nuestros menos, pero eso será buena señal, porque querrá decir que estamos luchando por victorias”, afirmó. El actual campeón del mundo ha añadido que dicha rivalidad interna ayudará a Honda indirectamente, especialmente en lo que al desarrollo de la moto se refiere. Como última referencia a su compañero, Márquez ha sido tajante: “Jorge está en mi lista de rivales por el título. Coge una moto que ha ganado los tres últimos campeonatos y tiene la obligación de ganar”. Por último, el piloto del Repsol Honda ha reconocido que el término “Dream Team” no le gusta: “Será Dream Team si llegamos bien al final del año”.
“Nos centraremos en mejorar la salida de la curva”
En el aspecto más técnico, Marc Márquez, a pesar de los éxitos de los últimos años, es consciente que la Honda debe mejorar si quiere mantener el nivel de competitividad. Para ello, el piloto del Repsol Honda tiene claro donde tienen que mejorar. “En lo que llevamos de invierno nos estamos centrando en mejorar la salida de las curvas, que es un punto donde puedes ganar mucho y nosotros hemos sufrido un poco más en comparación con el resto”, describe. El trabajo en el test de Sepang, según ha reconocido el propio Marc, estará focalizado en valorar si las nuevas piezas que pueda llevar HRC a esas pruebas sirven para mejorar ese aspecto. El objetivo para Márquez en 2019, eso sí, sigue siendo el mismo, el que exige estar en un equipo como el Repsol Honda: “Luchar por podios, victorias y por el Mundial”.
Más con la vista puesta al futuro, Marc Márquez no ha descartado un cambio de aires en el futuro, aunque también ha reconocido que, a día de hoy, no tiene ningún motivo para irse del Repsol Honda. “Nunca sabes lo que pasará mañana. Mi sueño era estar en este equipo y está yendo bien. Entonces, para qué cambiar? Estoy motivado, el equipo y la fábrica me dan el cariño que necesito y esto es lo más importante para un piloto”, concluyó el piloto de Cervera.
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