Tras volver a nacer el pasado fin de semana, Maverick Viñales se enfrenta de nuevo a un trazado que no le beneficia del todo a la Yamaha. Su objetivo principal está en que su M1 funcione y sacar del todo su potencial.
El Campeonato del Mundo de MotoGP regresa a la acción una semana después en el trazado de Austria para disputar por primera vez el Gran Premio de Styria, fruto del desorden provocado por la pandemia del Covid-19. Hoy se inaugura la cita con las primeras entrevistas y la rueda de prensa oficial, tras un pasado domingo cargado de emociones. Pudimos contemplar una jornada de carreras mermado de tranquilidad, con dos accidentes que dejaron a todo el mundo conmocionado y con una desagradable impresión, incluso con miedo. Maverick Viñales fue uno de los que pudo salir peor parado, pero con suerte, sólo se quedó en un susto.
Uno de ellos fue durante la carrera de MotoGP, cuando se produjo un fuerte incidente entre Johann Zarco y Franco Morbidelli en el que ambos fueron al suelo. Una tragedia que no sólo quedó ahí. A una velocidad desmesurada, las dos motos salieron disparadas con violencia hechas pedazos al borde de alcanzar por milésimas de segundo a los pilotos del Monster Energy Yamaha. “He visto las imágenes porque las han repetido un millón de veces, no es agradable, pero hemos tenido una suerte impresionante y hay que aprovecharlo saliendo mañana a por todas“, ha comentado en la conferencia de zoom con la prensa.
Finalmente, tras asomar bandera roja por los postes de comisarios en el trazado austriaco, se paralizó la carrera hasta retornar a la normalidad. La carrera fue reanudada, y Maverick Viñales concienciado de la suerte que lo envolvió, tan sólo pudo conformarse con la décima posición. Pero Yamaha continúa en crisis: los problemas de motor permanecen y los grandes resultados se complican cada vez más.
Todo depende de la MSMA y la aprobación del resto de fabricantes para abrir los motores sellados de la fábrica diapasona. Teniendo en cuenta las posibles válvulas defectuosas de un lote de motores asignados en Yamaha, a ello hay que añadir otros desajustes que arrastra la M1 previamente. “Si ves la carrera, los ritmos de las Yamaha caen, es un problema general de Yamaha y hay que solucionarlo. El problema de esta moto es que cuando hay grip va fantástica y cuando no lo hay cuesta mucho. El primer interesado en que funcione soy yo, así que intentaremos explotar nuevas áreas para sacar un poco más“.
A pesar de que desde el comienzo de la temporada Maverick Viñales ha sido capaz de sumar dos segundos puestos, los resultados parecen declinar con rapidez. Sin embargo, aun con posibles limitaciones, el piloto supo sacar lo mejor de sí mismo y de la M1 y marcar el mejor registro del sábado. Y de este modo, pudo partir por primera vez esta temporada desde el primer puesto. “Fuimos capaces de mejorar el tiempo de vuelta y la consistencia. Ahora lo que tenemos que encontrar es cómo mejorar en la carrera. Está claro que no es la mejor pista para nosotros, pero podemos demostrar potencia. No tenemos puntos muy positivos de las carreras anteriores, cometimos muchos fallos. Nos tenemos que tomar esta carrera como una buena oportunidad para mejorar y entender dónde son mejores los demás”.
“Para mí está bien que piensen que no estoy en la lucha por el título, me quita presión”
En carrera, para estar al frente y mantener un ritmo constante es necesario conjugar el agregado perfecto. Pero ello requiere de regularidad a lo largo de la misma, y parece que a Viñales es la parte que más dificultades le presenta. “Para una vuelta somos buenos. El punto positivo de la última carrera es que al final acabé siendo rápido. Pero tenemos que intentar serlo desde el principio y ser constantes con los neumáticos”.
Con Marc Márquez ausente durante los últimos grandes premios, y también este fin de semana, el título está más abierto que nunca en el inicio de temporada. Maverick Viñales puede ser uno de los contendientes, pero ni la M1, ni el resto de sus rivales lo están poniendo fácil. Fabio Quartararo no lo tiene a día de hoy como favorito. Actualmente se encuentra tercero en la clasificación general a escasos puntos del francés como líder. “Para mí está bien que piensen que no estoy en la lucha por el título, me quita mucha presión. Está claro que aún no hemos demostrado nuestro potencial por los errores que hemos cometido. Pero no estamos pensando en el campeonato, sino en mejorar la moto“.
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