
El Team Manager del Kawasaki Provec Racing confirmó en los micrófonos de Radio Marca que la fábrica japonesa intentará crear una moto a la altura de la Panigale V4 para poner fin al dominio de Bautista el año que viene. Por su lado, Rea reconoce que tras lo visto en el arranque de la temporada, deberá modificar sus expectativas de cara al resto del año.
El arranque del 2019, con las once victorias de once posibles de Álvaro Bautista y la sensación de dominio del de Talavera de la Reina ya está mostrando sus primeras consecuencias. Guim Roda, jefe de equipo del Provec Racing de Jonathan Rea confirmó lo que Ichiro Yoda, director técnico de Kawasaki, adelantó días atrás: “Kawasaki tiene en mente un proyecto muy grande que tiene la voluntad de no darse por vencido y poner sobre la mesa un producto que permita a Rea plantar cara a Bautista y a Ducati”.
Roda, que atendió a los micrófonos de Radio Marca en el día de ayer, reconoció el importante papel que está teniendo Bautista en el dominio de Ducati. “La moto es muy buena pero no hay que quitarle mérito a Álvaro. Si él no estuviera aquí, todo seguiría igual. Ha hecho subir el listón y hay que aceptarlo”, reconoció abiertamente el Team Manager. Y es que el rol de Roda ahora mismo pasa por encontrar la motivación en los miembros del equipo. “Cuando ganas hay que bajar el triunfalismo y cuando pierdes hay que buscar la motivación. Pero todo el mundo está motivado para poner entre las cuerdas cuando se pueda a Álvaro y a las Ducati”.

Mención aparte merece el caso de Jonathan Rea. El claro dominador del certamen durante las cuatro últimas temporadas, se ha encontrado a un rival al que, a día de hoy, ni dando lo mejor de sí puede ni siquiera se le puede acercar. En este sentido, Guim Roda reconoce que está tratando de gestionar la frustración que esto le genera a su piloto estrella. “La expectativa que se ha generado en los últimos años llevaba una inercia de triunfalismo que no era verdad. Hay que encontrar un nuevo reto y mejorarnos a nosotros mismos. Es frustrante para el piloto porque la limitación más grande no depende de él”, sentencia Roda, que añade que el nivel al que tiene que pilotar Rea para intentar cerrar la brecha con Ducati y Bautista no es sostenible. “Lo que no podemos pretender es estar mucho tiempo pidiendo mucho esfuerzo al piloto sin que la moto ayude a cubrir ese extra de esfuerzo. Ahora lo estamos exigiendo a Jonathan que a donde no llega la moto lo ponga él pero tan al límite durante mucho tiempo no se puede mantener”, reconoce.
Jonathan Rea: “Técnicamente estamos muy atrasados”
Precisamente, el norirlandés no esquiva el hecho de reconocer que, ahora mismo, Bautista está a un nivel superior al que él y su Kawasaki pueden mostrar. “Por el momento no veo ningún modo de cerrar la brecha. Técnicamente estamos muy atrasados y Bautista está pilotando muy bien. Esa combinación está llevando a los resultados que estamos viendo”, confiesa el cuatro veces campeón de SBK en declaraciones a Speedweek. Rea va más allá, y opina que Bautista aún no ha mostrado su potencial real: “Estoy seguro de que Bautista puede conducir más rápido, al 100 por ciento. Tan fácil como se pone en sus tiempos de vuelta, no puedo imaginar que ya esté explotando todo su potencial”.
Por último, el piloto de Kawasaki también reconoce que, de ahora en adelante, deberá rebajar sus expectativas de cara a los fines de semana de competición, empezando por el próximo, que se disputará en Imola. “Es una pista difícil y única, pero de todos modos voy a adaptar mis expectativas. Sólo después del FP2 sabremos dónde estamos”, sentencia.
Primer test de Bautista en mojado con la Panigale V4
Dentro del dominio apabullante que está teniendo Bautista en el Mundial de Superbike, el de Talavera de la Reina tenía dos aspectos pendientes de resolver: la llegada a circuitos que no conoce y acumular kilómetros en mojado con la Ducati Panigale. Ayer, con motivo de un test privado que los pilotos del Aruba.it Racing disputaron en Imola, Álvaro pudo solventar ambas tareas pendientes. El español descubrió los secretos de esta histórica pista, técnicamente de las más complicadas del calendario. Además, un chaparrón a durante la tarde le permitió empezar a coger sensaciones en condiciones de mojado a los mandos de la Panigale V4.

Por estos motivos, Álvaro se mostró de lo más satisfecho con el trabajo realizado en el circuito sanmarinense. “Hoy fue un día muy positivo porque tuve la oportunidad de correr en Imola, una pista en la que nunca lo había hecho antes. Ahora tengo algunas referencias para el fin de semana de carreras, que es lo realmente importante”, afirmó tras las pruebas el español, contento también por haber podido rodar en mojado. “Tuvimos la fortuna de que lloviera en la parte final del día y eso me permitió acumular los primeros kilómetros en mojado con los neumáticos Pirelli y la nueva moto. Estas condiciones habían sido las únicas que habíamos echado de menos este año”, concluyó el piloto español.
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