Hoy Jonathan Rea ha vuelto a coronarse, esta vez en Estoril, un circuito donde hace mucho tiempo que SBK no pasa.
Todos los días de carreras son distintos, eso está claro, pero hoy ha sido uno totalmente diferente y especial para Jonathan Rea. En los últimos años ha llegado con su primera oportunidad de ganar el título en Francia y lo ha acabado consiguiendo, aunque no en territorio francés. El norirlandés se ha proclamado campeón de WorldSBK por sexto año consecutivo.
Ha conseguido cosechar 11 victorias en esta extraña temporada marcada por la pandemia del Covid-19, a pesar de que el calendario tampoco haya sido el mismo. La temporada comenzó como de costumbre en Australia justo antes de comenzar el confinamiento, donde Rea pudo ganar solo una vez sabiendo que Phillip Island siempre es una pista complicada para que las Kawasaki lo hagan bien.
Otra historia ocurrió en Jerez, donde se vio por primera vez el potencial que traía consigo el nuevo de la clase; Scott Redding. El piloto de Ducati demostró que venía con ganas de plantarle cara a Johnny, pero finalmente no ha podido ser este año ya que Rea se ha declarado matemáticamente campeón de WorldSBK a falta de la última ronda en Estoril. En territorio portugués cerca de la capital en Lisboa, podrá llegar una vez más relajado y con el simple objetivo de disfrutar sobre la moto.
Racha de victorias
Portimao es un circuito que se le da muy bien al piloto de Kawasaki, y esta temporada no iba a ser menos. Ya cuenta con 100 victorias en total en toda su trayectoria en SBK, y diez de ellas son en el circuito de Algarve. Allí no tuvo rival, aunque Toprak Razgatlioglu sí que presionó fuertemente hasta que cayó la bandera a cuadros. Precisamente su compañero Michael van der Mark también ha sido uno de los rivales duros de la temporada, tanto que en Portimao estuvo dos veces en el podio de tres posibles.
Aragón fue un descafeinado de triunfos entre Rea y Redding, y en Teruel -segunda carrera celebrada en Motorland- apareció un nuevo rival temporal: Michael Rinaldi. El joven del GoEleven ha demostrado que este año sí que ha podido domar a la Ducati, aprovechando que Jonathan no pudo con él en esa ocasión. A pesar de esto, el de Ballymena ha mantenido la compostura ganando una vez en Montmeló siendo la primera vez que WorldSBK corre allí, para así encarar positivamente la primera bola de partido en Francia.
Llegando a territorio local para Loris Baz, Johnny tuvo que soportar la presión del de Ten Kate en la Race 1. Sin embargo, pudo aguantarlo y llevarse otro triunfo a su casillero, que el sábado de Magny-Cours se quedó en 98 victorias. En la Superpole Race no ha tenido rival ninguno, sino que ha conseguido liderar todas las 10 vueltas de la carrera al sprint y ser el primer clasificado.
La emoción real llegaba con la Race 2, y por consiguiente todo el protagonismo se centraba en Jonathan Rea. Las opciones eran fáciles: si gana es campeón, y aunque sea tercero y Redding gane, también. Lo malo es si es cuarto y Chaz Davies le adelantaba, pues en esa situación sí que se le escapaba el título. Es por esto que finalmente se aplazó el alirón de Rea en territorio francés para llegar a Estoril con toda la emoción por delante. Sus opciones son relativamente fáciles, pues terminando dentro de los 13 primeros clasificados en la Race 1 o si Scott Redding no gana, el campeonato es suyo.
El momento más tenso de la temporada ha sido la Race 1 en Estoril por todo lo que ha pasado, teniendo en cuenta que el líder del Mundial ha sufrido una aparatosa caída que destrozó su moto que usaría en carrera. Clasificando decimoquinto tendría trabajo que hacer, y en las primeras curvas ya se situaba quinto. Finalmente, el de Kawasaki se ha proclamado campeón de WorldSBK en Estoril tras saber que Scott Redding tenía problemas en su moto y se veía obligado a retirarse.
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