Saltar al contenido
MOTOSAN | MOTOGP, MOTOCICLISMO Y COMPETICIÓN. "Life is Racing"

Jorge Lorenzo: “Me encantaría seguir con Ducati, pero…”

13 Mar. 18 | 19:12
Foto: Motogp.com

Tras cosechar tres campeonatos mundiales de MotoGP, la pasada temporada el piloto Jorge Lorenzo cambiaba de color embarcándose en el proyecto Ducati. Una temporada después y seguro que unos cuantos dolores de cabeza más tarde, a ojos de los jefes de Ducati Lorenzo no ha dado todo lo que se esperaba. Sin embargo, comienza 2018, como una tabla rasa en la que no importa qué ocurrió en 2017 pero sí qué se aprendió en 2017 para mejorar en 2018.

En una entrevista concedida a “El País” , Jorge Lorenzo ha explicado cómo se ha preparado, cómo son sus expectativas para 2018 y qué supuso cambiar de una de las motos más estables a Ducati.

Sobre 2017

Respeto todas las opiniones, en especial la de mi jefe; él tiene una opinión, yo otra. Al final, hay respeto y confianza, que es lo importante. Lo que está claro es que el año pasado me costó más de lo que pensamos; no gané ni una carrera. Pero progresé. Y luché en las últimas cinco carreras por estar entre los primeros. Me adapté a la moto, pero no conseguí los resultados a los que estaba acostumbrado en Yamaha. Eso son hechos, pero mi opinión es que el año pasado trabajé más que nunca por intentar ser competitivo. Si no lo logré no fue ni por falta de entrega, ni de trabajo.

Está bastante claro que la forma de pilotar no se cambia de un día para otro  -más cuando es entre motos tan diferentes como Yamaha y Ducati-. Sin embargo, las últimas carreras del mallorquín supusieron un avance y habrá que ver si la mezcla de trabajo y experiencia obran el milagro de la primera victoria de Lorenzo a lomos de la Desmocedici en 2018.

Sobre sí mismo y su preparación para 2018

En Sepang me costó mantener el ritmo y que fuéramos competitivos. El circuito de Thailandia se me atragantó un poco y no fui rápido ni a una vuelta. En Qatar fue mejor, pero también mejoraron los otros

Con esta moto tengo que pilotar todavía un poco de forma antinatural. Estoy intentando encontrar aún el truco para hacer girar la moto en las curvas. Dovizioso, por su manera de pilotar o por los años que lleva, sabe ciertos trucos para hacer girar la moto en la curva que a mí todavía me falta entender y aplicar en la pista para sacarle el máximo potencial. Quizá no me resulte tan natural llevarla como cuando cogí la Yamaha por primera vez. La moto ha mejorado, pero también lo han hecho los otros. Aun así, creo que Gigi [Dall’Igna, director general] y los ingenieros conseguirán hacer la mejor moto de la parrilla. Y que yo puedo aspirar al título mundial.

Es aquí donde el tres veces campeón del mundo hace un balance entre su tipo de pilotaje y el de su compañero. No es ningún secreto que las diferencias de pilotaje pueden ser clave entre los dos compañeros de equipo. Tampoco lo es que hay una norma no escrita que dicta que el primero a quien se debe ganar es al compañero de equipo, cosa que Lorenzo no ha conseguido. Mientras Dovizioso brillaba con luz propia, él no conseguía llegar ganar una carrera. A favor de Lorenzo, decir que es su primera temporada y que si consigue mejorar su forma de llevar la Ducati como él mismo expresa puede llegar a conseguir un objetivo que Valentino Rossi no pudo: conseguir un título con la fábrica italiana (todo esto salvando las distancias de las diferencias de moto de ambos).

MotoGP se ha convertido en un campeonato tan competitivo y tan profesionalizado que no basta con estar motivado. Tienes que estar obsesionado por la perfección, por cuidar el más mínimo detalle. Y he querido dar un paso más en cuestiones como la preparación física y la dieta. Poco a poco, esa obsesión irá dando sus frutos. Creo que con un poco más de fuerza ganaré resistencia en las carreras y será más sencillo dominar y mover la moto, que requiere de más potencia física que la Yamaha, con un motor muy dócil. Este motor es agresivo, muy potente y tiene una cierta inercia entrando en curva que no tienen otras motos más convencionales. Pero también tiene puntos muy positivos, que hay que saber aprovechar, como la potencia o la estabilidad en frenada. Con ella se pueden ganar muchas carreras, como hizo Dovizioso el año pasado.

Otro factor a tener en cuenta hoy en día es la preparación física de los pilotos, no solamente por lo brusca que pueda ser la Desmosedici -que también- sino que cada vez más la MotoGP exige mayor resistencia y llegar a los último virajes en la mejor forma posible para una posible pelea por la cabeza de carrera o la victoria en el mejor de los casos.

Foto: Motogp.com

Gigi es muy terco; no parará hasta que gane el campeonato. Si la moto hoy gira más en las curvas es porque yo he insistido en que era muy importante trabajar en distintos tipos de chasis. Ahora solo me faltan los resultados; y que me adapte lo más rápido posible.

Nos permite girar más, pero también tiene algunos puntos negativos que solventar. Mientras eso ocurra hay que intentar adaptarse lo más rápido posible, trabajar en los reglajes que disimulen esos aspectos negativos y entender cómo hace Dovizioso para conseguir esas últimas dos décimas que me faltan para luchar por la victoria regularmente.

Lo que está claro es que es el mallorquín quien con ayuda de sus ingenieros debe dar con la tecla -ya sea cambiando el tipo de chasis o de cualquier otra forma- para llegar a domar a la bestia roja. Esto es lo único que el mallorquín puede hacer para conseguir ganar el campeonato: persistir, trabajar y hacer suya la Ducati.

Cuando llegué a Yamaha, sin cambiar mucho mi estilo de pilotaje de 250cc fui competitivo desde el principio. Al ser competitivo no trabajas en cambiar el estilo ni te rompes la cabeza pensando en dónde mejorar o si probar ciertas cosas, simplemente pilotas por instinto; y entras en una rutina, también por el hecho de trabajar con la misma gente, en el mismo equipo, con la misma filosofía, y quizá te acomodas y pierdes un poco la pasión. El hecho de intentar ganar con una moto con la que solo ha podido ganar Casey Stoner, una moto que tiene fama de ser complicada y que ha terminado con la carrera de algunos pilotos, me hace recobrar la pasión al querer conseguir un desafío muy difícil.

Sin duda, son declaraciones de un campeón del mundo con mucha hambre de victoria. Salir de una zona de confort y de una moto un poco más estable para desafiar un reto es algo que muy pocos hacen y que todavía menos consiguen.

¿Y los demás?

Desde la aparición de los Michelin y la nueva electrónica se ha igualado tanto todo que cualquiera puede ganar carreras. Las cinco marcas están ahora a un nivel muy parecido, porque electrónicamente no puedes marcar la diferencia, solo con el motor y el chasis. Y los Michelin hacen que sea muy difícil tener constancia en las 19 carreras.

Está caro que la igualdad entre las marcas brinda un espectáculo grandioso a todos los aficionados pero pone mucho más difícil marcar la diferencia.

¿Planes de futuro?

No lo sé. No sé qué pasará. Estoy en una situación en mi vida en que puedo elegir. Veremos qué me conviene. Sigo pensando que me encantaría seguir en Ducati, que sería lo más lógico y lo más bonito, pero pueden pasar muchas cosas.

Como ya ha advertido anteriormente, Lorenzo no se atreve a aventurar qué pasará en el futuro. Sin embargo, a día de hoy es Ducati quien ocupa la mente del cinco veces campeón del mundo.

¿Sabes cómo ver MotoGP en 2018?